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"El ecocidio debe perseguirse tanto en tiempos de paz como de conflicto" - Michael Mansfield KC

Este blog ha sido escrito por Michael Mansfield KC, abogado inglés y director del despacho Nexus Chambers.

Esta entrada forma parte de un Blog de invitadxs que pretende ser un espacio dedicado a los numerosos movimientos/campañas de todo el mundo que se enfrentan a la destrucción de los ecosistemas para que compartan sus historias, relatos y perspectivas.

Este blog ha sido escrito por Michael Mansfield KC, abogado inglés y director de Nexus Chambers.


 "No se puede dar a las empresas licencia para verter y matar, siempre que limpien el desaguisado".

Estas fueron mis observaciones finales cuando dirigí la acusación en el primer simulacro de juicio por ecocidio en 2011. El juicio se centró en un vertido de petróleo corporativo ficticio en el Golfo de México, reflejo del desastre de Deepwater Horizon del año anterior.

Me he pasado la vida luchando contra la injusticia y me enorgullece decir que he utilizado la ley a lo largo de mi carrera para ayudar a los necesitados. Sin embargo, la ley, en su estado actual, no es adecuada para la protección del medio ambiente mundial.

En los años transcurridos desde nuestro juicio simulado, el movimiento para tipificar como delito el ecocidio ha recorrido un camino extraordinario. El mes pasado, respondí a una consulta pública de la Corte Penal Internacional (CPI) junto con muchas otras personas, entre ellas Laura Mary Clarke OBE, (CEO, ClientEarth) y Sandrine Dixson-Declève (Copresidenta, Club de Roma), abogando por la introducción de un nuevo delito internacional de ecocidio en el Estatuto de Roma.

No hay duda: el ecocidio es una cuestión de derechos humanos que merece ser enjuiciada tanto en tiempos de paz como de conflicto. En la actualidad, la única protección explícita del medio ambiente que ofrece la CPI se aplica a los actos cometidos en tiempo de guerra. Sin una salvaguarda jurídica internacional independiente para proteger la naturaleza, la seguridad humana y los medios de subsistencia estarán siempre amenazados.

Una conexión que no se le escapa a la nación insular de Vanuatu, que en 2019 se convirtió en la primera nación soberana en pedir el reconocimiento del ecocidio ante la CPI. Vanuatu, un excelente ejemplo de cómo la crisis ecológica y climática afecta de manera desproporcionada a los menos responsables, se enfrenta a la subida del nivel del mar, que amenaza las infraestructuras costeras y, lo que es más terrible, está salinizando las reservas de agua dulce de las islas, lo que provoca inseguridad alimentaria e hídrica.

Sin embargo, la marea está cambiando a favor de la ley de ecocidio, y con acontecimientos profundamente desafortunados como la destrucción de la presa de Kakhovka en Ucrania, el concepto de ecocidio está acaparando una importante atención mundial.

En el último año, una lista cada vez mayor de Estados ha dado pasos concretos hacia el establecimiento de nuevos delitos nacionales de ecocidio, entre ellos los Países Bajos, México, España y Escocia.

El avance político más significativo en la legislación sobre ecocidio se produjo en febrero, con la adopción por el Consejo Europeo de una Directiva revisada sobre delitos contra el medio ambiente, que incluye disposiciones para tipificar como delito casos "comparables al ecocidio". En marzo, el Parlamento Federal belga votó a favor de reconocer el delito.

Nos enfrentamos a los límites medioambientales que permiten que prospere la vida en este hermoso planeta. Ha llegado el momento de que la CPI esté a la altura de este reto e introduzca por fin un nuevo delito autónomo de ecocidio.

Michael Mansfield KC es un abogado especializado en derechos humanos responsable de la acusación en casos de gran repercusión, como los Seis de Birmingham, los Cuatro de Guildford y los Nueve de Mangrove. 

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El devastador impacto del ecocidio en mujeres y niños de Uganda

Este blog ha sido escrito por Linet Nabwire, defensora de la justicia climática y jefa de equipo y fundadora de Climate Transformation Network.

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Este blog ha sido escrito por Linet Nabwire, defensora de la justicia climática y jefa de equipo y fundadora de Climate Transformation Network.


Introducción

En los últimos años, Uganda ha experimentado las graves consecuencias del cambio climático, con penosas consecuencias para las comunidades vulnerables, especialmente en Namulindwa (Uganda oriental) y la región de Kasese. Estas regiones se han enfrentado a catastróficos corrimientos de tierra e inundaciones, que han provocado el desplazamiento de personas, la pérdida de vidas y la destrucción de propiedades. 

El ecocidio, la destrucción generalizada o a largo plazo de los ecosistemas, incluye actos como la tala de bosques tropicales primarios, la deforestación o los grandes vertidos de petróleo, y puede entenderse como un crimen tanto contra los seres humanos como contra el medio ambiente. Las consecuencias humanas del ecocidio las sufren de forma desproporcionada las comunidades vulnerables, exacerbando las desigualdades sociales y las disparidades de género. En Uganda, las mujeres y los niños se llevan la peor parte de la destrucción ecológica. Este artículo pretende arrojar luz sobre los efectos de largo alcance del ecocidio en estos grupos marginados y amplificar la necesidad urgente de actuar.

Soportar el peso de la devastación ecológica

Las mujeres de Uganda, especialmente las que residen en Namisindwa y la región de Kasese, se enfrentan a las consecuencias más duras del ecocidio. A menudo son las principales cuidadoras, responsables de proporcionar alimentos, agua y cobijo a sus familias. A medida que los recursos naturales escasean debido al cambio climático, las mujeres se ven obligadas a recorrer distancias más largas para buscar agua y leña, lo que las expone a un mayor riesgo de acoso, agresión e incluso muerte. Además, la degradación del medio ambiente perturba los sistemas agrícolas, dejando a las agricultoras con dificultades para alimentar a sus familias.

Los niños y las niñas son intrínsecamente vulnerables a las repercusiones del ecocidio. Los devastadores corrimientos de tierras e inundaciones provocados por el cambio climático han interrumpido el acceso a la educación, la atención sanitaria y las necesidades básicas. Las escuelas quedan destruidas o son inaccesibles, lo que provoca la interrupción de la educación, sobre todo en el caso de las niñas, que tienen más probabilidades de ser retiradas de la escuela debido a las normas tradicionales de género. Además, estas catástrofes aumentan la prevalencia del trabajo infantil, los matrimonios precoces y la trata de seres humanos, robando a niños y niñas su infancia y sus perspectivas de futuro.

Hacer frente a la crisis

Ante estas desgarradoras realidades, la Red de Transformación del Clima (CTN) surgió como un faro de esperanza para las comunidades afectadas. CTN reconoce que hacer frente a las consecuencias del cambio climático requiere esfuerzos concertados en favor del desarrollo sostenible, la preservación del medio ambiente y la capacitación de mujeres y niños. El innovador proyecto de la organización, que consiste en confeccionar colgantes de pared y marcos de fotos con tapones metálicos de botellas reciclados y piezas de ropa recortadas, no sólo hace frente a la contaminación ambiental, sino que también proporciona una fuente de ingresos a las mujeres y niñas marginadas.

Como muchos en el Sur global, las mujeres y los niños de Uganda son los menos responsables de los impactos ecológicos y climáticos que amenazan cada vez más sus vidas y medios de subsistencia. Están cayendo por una laguna del derecho penal internacional, que actualmente carece de disposiciones para castigar y prevenir las formas más graves de destrucción medioambiental. Estos daños trascienden comunidades y fronteras y destruyen vidas humanas. Es imperativo que los gobiernos tomen medidas para establecer una legislación sobre ecocidio tanto a nivel nacional como internacional. Además, empoderar a las mujeres y las niñas mediante la educación, la formación profesional y el desarrollo del liderazgo es crucial para mejorar su resiliencia y su capacidad de adaptación a un clima cada vez más implacable.

Como individuos, podemos contribuir apoyando a organizaciones como CTN mediante donaciones, voluntariado o comprando sus artesanías sostenibles. Además, la sensibilización sobre los efectos del ecocidio en las mujeres y los niños de Uganda es esencial para inspirar un cambio significativo y recabar el apoyo público a la justicia climática y ecológica.

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La historia inacabada de un río moribundo

Este blog ha sido escrito por Cathy Cliff, asesora de políticas de campaña de la Soil Association.

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Este blog ha sido escrito por Cathy Cliff, asesora de políticas de campaña de la Soil Association.


El 12 de marzo de 2024, la Soil Association lanzó Stop Killing our Rivers (No matemos nuestros ríos), una campaña que reclama la actuación urgente del gobierno para hacer frente al impacto de la cría intensiva de pollos en los preciados ríos del Reino Unido. 

El río Wye (que nace como Afon Gwy en Gales) fluye a lo largo de 155 millas desde los montes Cámbricos, en el centro de Gales, hasta el estuario del Severn, en el oeste de Inglaterra. En 2020, una espesa floración de algas se extendió a lo largo del río durante más de 140 millas, matando gran parte de la vida bajo la superficie. La causa de la proliferación era la eutrofización: los nutrientes, principalmente fosfatos procedentes de los desechos de las granjas industriales de pollos, habían llegado a las aguas, provocando un rápido crecimiento de las algas y privando al río de oxígeno. La actividad agrícola intensiva se había sumado a la presión que ejercían sobre el río otras fuentes de contaminación, como las aguas residuales. A pesar de todas las protecciones legales existentes, el Wye luchaba por sobrevivir.

"Desfavorable-declinante"

En 2023, el estado del río Wye fue degradado por Natural England a "desfavorable-en declive" debido a la disminución de especies clave que deberían estar protegidas por su designación como Zona Especial de Conservación en virtud del Reglamento de Hábitats y Especies. 

La contaminación por fosfatos es especialmente preocupante en la cuenca, ya que el exceso de fosfatos en los suelos locales debido al esparcimiento de estiércol de ganado desemboca en el río y provoca la proliferación de algas que eliminan el oxígeno del agua y bloquean la luz solar, acabando con la biodiversidad natural.

Los niveles de fosfatos en el río Wye han sido peligrosamente altos durante varias décadas, pero la industria avícola, en rápido crecimiento, ha sido la gota que ha colmado el vaso. Todas las autoridades reguladoras de Inglaterra y Gales han identificado la avicultura intensiva como una fuente clave de contaminación por fosfatos. 

Los pollos son ahora los animales más numerosos criados en la cuenca, con más de 20 millones de aves criadas en un momento dado, una cuarta parte de todos los pollos del Reino Unido. Los pollos de engorde o "de carne" se producen en cantidades especialmente elevadas en cualquier explotación, sobre todo si se tiene en cuenta que el pollo de engorde medio sólo vive 40 días y que puede haber unas 7 "cosechas" al año en cada unidad. Muchas explotaciones tienen varias unidades. 

Los enormes volúmenes de estiércol generados por los pollos de estas unidades se esparcen por las tierras locales y son la fuente de contaminación por fosfatos del río. 

Esta situación, en la que uno de nuestros lugares de conservación más importantes se ha visto tan gravemente afectado por la presencia de estas unidades avícolas intensivas, es en parte el resultado de fallos en el sistema de planificación. En gran medida, sin embargo, es nuestro sistema alimentario y una regulación ineficaz lo que ha favorecido el trágico declive del río. 

El sistema alimentario británico está sostenido por una cadena de suministro consolidada en la que empresas internacionales de procesamiento de alimentos y supermercados mueven los hilos y presionan a los agricultores. Los precios se mantienen bajos con la excusa de que los consumidores quieren y esperan pollo barato, a pesar de que hoy pagamos por un pollo menos de la mitad de lo que pagábamos en 1971 y a menudo por menos de lo que cuesta una taza de café. 

La normativa medioambiental existente nos está fallando claramente, dejando un vacío en el derecho penal nacional e internacional donde la naturaleza debería estar protegida. Pero las cosas podrían haber sido muy distintas si hubiera existido un derecho internacional del ecocidio, como se pretendía en un principio.

Una gran oportunidad

Cuando en 2002 se creó la Corte Penal Internacional para perseguir los crímenes que la humanidad consideraba más graves (genocidio, crímenes de lesa humanidad, crímenes de guerra y crímenes de agresión), también se había previsto incluir el ecocidio, es decir, los daños graves al medio ambiente. Aunque el ecocidio figuró en los muchos años de debate que condujeron a la creación de la CPI, de repente se descartó. Las razones siguen siendo un misterio, pero con ello se perdió una gran oportunidad de crear una poderosa protección para el medio ambiente. La tipificación del ecocidio como uno de los delitos más graves habría enviado un mensaje contundente a escala internacional de que los daños graves al medio ambiente son inaceptables.

Habría llegado a las salas de juntas y a los despachos de los ministros de todo el mundo, donde se toman muchas de las decisiones que provocan la destrucción del medio ambiente, y habría cambiado el proceso de toma de decisiones. Con toda probabilidad, habría influido en las decisiones que han permitido la proliferación incontrolada de las unidades avícolas intensivas a lo largo de las riberas del Wye. Es demasiado tarde para que la ley de ecocidio evite el daño al Wye -ahora estamos obligados a encontrar formas de salvarlo-, pero puede proteger otros ríos y ecosistemas preciosos en el futuro.

Si se actúa con rapidez, el Wye aún podría salvarse, pero otros ríos y ecosistemas del Reino Unido siguen en peligro. Hemos identificado otros 10 ríos en Inglaterra y Gales cerca de los cuales se ha autorizado el establecimiento de varias unidades avícolas intensivas. Estos ríos también pueden estar en riesgo de contaminación por las granjas avícolas, ahora o en el futuro, si la producción sigue aumentando. Tenemos que reducir el número de pollos en todo el Reino Unido. Las dietas y la producción deben cambiar rápida y radicalmente.

Lo que realmente necesitamos es un cambio de sistema: hay que poner fin a la construcción de unidades avícolas intensivas y reducir el número de las existentes. Las unidades restantes deberían funcionar con un nuevo sistema de permisos aplicado a umbrales de población mucho más bajos que incluyan requisitos de bienestar animal y gestión de residuos. 

Necesitamos una transición justa y segura para que los granjeros abandonen esta industria perjudicial. Muchos granjeros están atrapados en un compromiso financiero a largo plazo con una unidad avícola en sus tierras, con préstamos contraídos como parte de un contrato con un procesador de pollos. 

Esta transición debe gestionarse cuidadosamente para proteger los medios de subsistencia de los productores y dar prioridad al bienestar de los animales. Exigirá cambios en todas las cadenas de suministro, cambios en la dieta y un trato justo para agricultores y consumidores. 

Necesitamos menos pollos en las unidades avícolas existentes mediante la aplicación del Compromiso por un Pollo Mejor, un conjunto de normas que los minoristas y los operadores de servicios alimentarios pueden suscribir, comprometiéndose a abastecerse de carne de pollo producida como resultado de prácticas menos intensivas, incluyendo aves de crecimiento más lento, menos residuos y una menor dependencia de productos como la soja que se cultivan en entornos sensibles en el extranjero. Necesitamos la eliminación progresiva de las aves de corral industriales en escuelas y hospitales.

El tiempo apremia, pero no es demasiado tarde.

Si actuamos con rapidez y cuidado, podemos acabar con la contaminación de la cría industrial de pollos y devolver la vida a nuestros ríos.  

Por favor, únase a nosotros para enviar un mensaje a los Gobiernos del Reino Unido

Firme la petición de la Soil Association

1) Prohibición de nuevas unidades de cría intensiva de pollos 

2) Ayuda a los agricultores para que abandonen este sector perjudicial 

3) Medidas para reducir el consumo de pollo a niveles más sostenibles

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Stop Ecocidio Internacional Stop Ecocidio Internacional

Cómo se benefician los arrecifes de coral de una ley de ecocidio

Este post ha sido escrito por Lyndon DeVantier, ecólogo coralino independiente.

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Este post ha sido escrito por Lyndon DeVantier, ecólogo coralino independiente.


Ahora está más que claro que el statu quo económico, político y jurídico está fracasando a la hora de evitar el colapso acelerado de los preciosos y biodiversos arrecifes del mundo. Los repetidos llamamientos a la racionalidad y la buena voluntad de los actores poderosos, que tienen la capacidad de prevenir voluntariamente el colapso climático y la muerte asociada de los arrecifes de coral, han sido desoídos. La ley contra el ecocidio representa un nuevo paradigma de aplicación para disuadir de la destrucción de los arrecifes.

El estado de los arrecifes del mundo

La mayor parte del calor provocado por las emisiones de gases de efecto invernadero, además del 25% de CO2, ha sido absorbido por los océanos y, en consecuencia, la temperatura del mar aumenta. Este aumento de la temperatura alimenta las olas de calor marinas, que provocan la enfermedad y muerte de los arrecifes. Mientras tanto, la contaminación supone una amenaza cada vez mayor para los ecosistemas de los arrecifes, en particular por el plástico derivado de la petroquímica. Se prevé que la producción de plástico se triplique de aquí a 2060 y las empresas responsables, en su mayoría empresas de combustibles fósiles, no tienen intención de "cerrar el grifo".

Decoloración del coral en Samoa Americana, 2015.
Foto: The Ocean Agency / Banco de imágenes oceánicas

"El camino al infierno está empedrado de buenas convenciones"

En las últimas décadas, la buena voluntad internacional y el duro trabajo de las negociaciones sobre el clima han dado lugar a algunos tratados históricos con objetivos ambiciosos y admirables para reducir las emisiones y proteger el medio marino. Sin embargo, el comentario de Bert Rölling de que "el camino al infierno está empedrado de buenas convenciones" es pertinente en este contexto, ya que siguen apareciendo pruebas contundentes del incumplimiento de los acuerdos medioambientales por parte de los Estados.

Por ejemplo, el mundo no cumplió ni un solo elemento de las metas de Aichi de 2010 destinadas a proteger la biodiversidad. Además, el mundo está "muy lejos" dealcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU, dirigidos a mitigar la pobreza junto con la protección del medio ambiente. Entre ellos se encuentra el ODS 14, la protección del medio marino.

Marcos jurídicos y aplicación

Pez atrapado en una bolsa de plástico, Indonesia.
Photo
: Unsplash

En el centro de la falta de adhesión a los objetivos medioambientales está la falta de exigibilidad y los intereses jurídicos contrapuestos en juego. La ratificación en 2023 del tratado multilateral sobre Biodiversidad fuera de las Jurisdicciones Nacionales (BBNJ, por sus siglas en inglés) en el marco de la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar (CNUDM) ilustra bien este punto. El tratado BBNJ representó un marco significativamente novedoso en la protección de los ecosistemas de alta mar fuera de las jurisdicciones nacionales y hasta ahora ha sido ratificado por 84 Estados. Pero los tratados zonales como el de la BBNJ están limitados por otros mecanismos dentro de la CNUDM, como en el ámbito del transporte marítimo, la pesca, la minería y la resolución de disputas territoriales.

Este choque de intereses contrapuestos es evidente en el caso del archipiélago Spratly, en el Mar de China Meridional, que alberga numerosos sistemas de arrecifes. La perspectiva de una protección multilateral de los arrecifes se ve obstaculizada por el rechazo de China a las reivindicaciones territoriales de varios países, una disputa motivada en gran medida por la rentabilidad de los recursos marinos de la zona y otros motores económicos de las reivindicaciones territoriales.

El statu quo económico

El fracaso en la consecución de los objetivos climáticos se debe a nuestra obsesión por el crecimiento económico. El crecimiento induce el rebasamiento de límites planetarios como el consumo, los residuos y la población, lo que lo hace fundamentalmente incompatible con los objetivos climáticos existentes. Sin embargo, hasta la fecha, la opinión pública mundial es poco consciente de este hecho y el discurso político mundial apenas lo reconoce.

Mientras tanto, las corporaciones perjudiciales para el medio ambiente han impulsado la escasa aplicación de la normativa medioambiental. Un puñado de empresas especialmente perjudiciales para el medio ambiente, sobre todo las megacorporaciones de combustibles fósiles que contaminan los océanos, ejercen los grupos de presión más agresivos para proteger sus beneficios, recurriendo al encubrimiento y al engaño para impedir que el público conozca sus daños medioambientales y frenar las iniciativas que regularían esos incidentes. La "paradoja de la contaminación", explica George Monbiot, consiste en que "las empresas más perjudiciales tienen el mayor incentivo para invertir dinero en política... Así que la política, en nuestro sistema impulsado por el dinero, llega a estar dominada por las empresas más perjudiciales".

Nuevos paradigmas jurídicos

La dirigente indígena Valdelice Veron, la dirigente guaraní-kaiowá y la académica y activista medioambiental de fama mundial Vandana Shiva.
Photo: Stop Ecocidio Internacional

En los últimos años se ha acelerado la evolución hacia la Jurisprudencia de la Tierra, un marco jurídico ecocéntrico. En relación con los arrecifes, un ejemplo notable de Jurisprudencia de la Tierra es la iniciativa de la ONU "Hacia una Declaración Universal de los Derechos de los Océanos". También se ha avanzado en la aplicación de la ley mediante el avance de 2100 demandas nacionales e internacionales relacionadas con el medio ambiente en todo el mundo desde 2017. La utilidad de las demandas nacionales para proteger los arrecifes quedó ilustrada por el caso presentado contra el Servicio Nacional de Pesca Marina de Estados Unidos en virtud de la Ley de Especies en Peligro de Estados Unidos por no haber finalizado la protección de las especies de coral.

Sin embargo, los actores poderosos siguen sin rendir cuentas en gran medida a través del derecho civil. La compensación económica por los daños causados a los ecosistemas es una noción problemática en sí misma, pero también suele incluirse en los costes de las empresas.

Además, la escala de daños puede ser totalmente inadecuada, mientras que los individuos que toman decisiones destructivas para el medio ambiente están protegidos por el velo corporativo.

Ecocidio

Muchos de los defectos del sistema jurídico que he descrito podrían remediarse con una ley de ecocidio. La penalización del ecocidio, tanto a escala internacional como nacional, tendría un importante efecto disuasorio para los agentes estatales y empresariales que se planteen aplicar políticas o acciones perjudiciales para el medio ambiente. Los incidentes de contaminación significativa de los arrecifes podrían dar lugar a condenas penales y sanciones económicas realmente proporcionales a la magnitud del daño ecológico.

En la práctica, la definición propuesta de ecocidio como algo que ocurre a "largo plazo" y "durante un periodo de tiempo razonable" podría respaldar su aplicabilidad a la destrucción de arrecifes, dado que el rebrote de los arrecifes lleva décadas y la recuperación total puede incluso "tardar siglos". Además, las categorizaciones de la vulnerabilidad de los ecosistemas, como la Lista Roja de Ecosistemas de la UICN, podrían proporcionar un marco para calcular las condenas y reparaciones a los sistemas de arrecifes vulnerables y sus especies. Y lo que es más importante, los actores del sector de los combustibles fósiles que más contribuyen al calentamiento de los océanos también podrían ser condenados penalmente por participar en el retraso y el engaño climáticos.

Conclusión

El fracaso de la economía "de siempre" y de los mecanismos internacionales dominantes de protección del medio ambiente nos han llevado por la senda del colapso de nuestros preciados sistemas de arrecifes. Un nuevo mecanismo jurídico, con aplicación penal, es esencial si queremos cambiar el rumbo de la destrucción. Hasta 50 Estados signatarios del Estatuto de Roma albergan arrecifes de coral y biohermas. La comunidad científica debe ayudar a presionar a esos Estados para que tipifiquen como delito el ecocidio.

Los científicos pueden unirse a la creciente iniciativa mundial para establecer nuevos delitos autónomos de ecocidio a nivel nacional, regional e internacional aquí: https://www.stopecocide.earth/scientists.

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Ecos del ecocidio: La lucha de Panamá contra la minería y la desigualdad

Este post ha sido escrito por las activistas estudiantiles panameñas Sofía Ramírez Vakratsas y Andreina Correa Quirós.

Esta entrada forma parte de un Blog de invitadxs que pretende ser un espacio dedicado a los numerosos movimientos/campañas de todo el mundo que se enfrentan a la destrucción de los ecosistemas para que compartan sus historias, relatos y perspectivas.

Este post ha sido escrito por las activistas estudiantiles panameñas Sofía Ramírez Vakratsas y Andreina Correa Quirós.


Ecos del ecocidio: La lucha de Panamá contra la minería y la desigualdad

El 20 de octubre, el gobierno de Nito Cortizo firmó un contrato por el que se concedía a First Quantum, una empresa minera canadiense, un derecho minero de 20 años sobre los bosques tropicales de Panamá para extraer cobre y molibdeno. Se trata de minerales utilizados para la transición energética sostenible del Norte Global, pero ¿cuáles son las consecuencias para el medio ambiente y las comunidades del Sur Global? ¿Forma esto realmente parte de una transición justa hacia un futuro sostenible?

La firma de este contrato es inconstitucional. La biodiversidad y la humanidad están directamente amenazadas al entregarse más de 12.000 hectáreas de selva tropical a potencias extranjeras. Mientras Panamá recibe 375 millones de dólares de ingresos anuales, sólo el 15% de los beneficios totales de First Quantum, las consecuencias de la explotación minera son devastadoras.

Minera Panamá = Ecocidio.

La topografía de Panamá, caracterizada por un territorio estrecho y megadiverso con más de 500 ríos, la hace excepcionalmente vulnerable a las consecuencias medioambientales y sociales de la minería industrial.

Minera Panamá es el proyecto de First Quantum en la provincia de Colón. Se encuentra en el Área Protegida de Donoso, donde residen más de 1.000 especies en peligro de extinción. Panamá, al formar parte del mayor corredor biológico de Mesoamérica, tiene una importancia crítica para la biodiversidad de la región. Si éste se interrumpe, habrá consecuencias ecológicas para todo el continente americano.

Aunque el gobierno está obligado por ley a salvaguardar esta zona y su vida salvaje, el Presidente Cortizo declaró públicamente que el contrato está firmado y prevalecerá. Lo que estamos presenciando es nada menos que un ecocidio, una destrucción generalizada e irreversible de la tierra y el asesinato de nuestro hogar.

La extracción de cobre aumenta la toxicidad en el aire, la tierra y el agua. Los ecosistemas están en juego, y a medida que se pone en peligro el acceso al agua, las familias panameñas de las zonas rurales ya están viviendo las repercusiones de la minería. Algunos niños se han intoxicado por consumir agua contaminada, y se han relacionado enfermedades respiratorias e inmunitarias en adultos con vivir cerca de las minas.

Deforestación resultante de la construcción del proyecto minero y las carreteras de acceso asociadas. Foto cortesía de CIAM.

Respuesta cívica

Aunque los panameños han expresado ampliamente su descontento a lo largo de la presidencia de Cortizo, esta decisión ha causado indignación. Lo que comenzó como grupos de unas pocas decenas de manifestantes convocados a través de las redes sociales por organizaciones juveniles como Sal de Las Redes, como Sin Minería en respuesta a preocupaciones ambientales, creció hasta convertirse en protestas masivas con más de cien mil civiles a nivel internacional.

Los actos de desobediencia civil se desencadenaron por la renovación del contrato minero, pero representan actitudes más amplias contra la corrupción gubernamental, la desigualdad y el neocolonialismo. Estas manifestaciones masivas no se veían desde la Cruzada Civilista de Panamá de 1987 contra el Régimen Dictador del General Noriega. Como el contrato tiene la opción de prorrogar esta concesión otros 20 años, la acción civil continúa, ya que representa la historia de explotación colonial del país. Trayendo como consecuencia el renacimiento del nacionalismo panameño, y planteando la cuestión de si Panamá ha sido alguna vez realmente un Estado soberano.

Transición justa

Transición justa es el concepto de que el cambio del mundo hacia un futuro con cero emisiones netas debe ser inclusivo y justo para todos los países, grupos sociales y comunidades. Para la transición a tecnologías energéticas limpias, como los paneles solares y los coches eléctricos, se necesitan minerales críticos. Entre estos materiales críticos se encuentran el cobre y el molibdeno. Estos minerales se adquieren a través de operaciones mineras que tienen lugar en naciones vulnerables como Panamá.

En el bienintencionado enfoque del norte global hacia una transición energética limpia, las naciones del sur global se están viendo afectadas negativamente. Dado que la minería está en el centro de la transición energética, debemos abordar este reto. La minería, a menudo impulsada por empresas multinacionales de países poderosos, explota los recursos de las naciones menos desarrolladas económicamente. Refleja los modelos de explotación del colonialismo verde y crea un ciclo de explotación y dependencia económica.

A medida que se extraen recursos de nuestras tierras, entidades como First Quantum amasan riqueza, dejando tras de sí un rastro de degradación medioambiental y problemas sociales. Paradójicamente, estas acciones se llevan a cabo bajo la creencia de que contribuyen a un bien global. Abordar este reto es primordial para garantizar que la transición hacia una energía limpia sea verdaderamente justa y beneficie a todos, en lugar de perpetuar la desigualdad y el daño.

El Tribunal Supremo declara inconstitucional un contrato minero

Las ONG, apoyadas por académicos, presentaron una demanda ante el Tribunal Supremo contra el contrato con First Quantum. Los ciudadanos llevan días haciendo guardia ante el tribunal. El 28 de noviembre, el Tribunal declaró inconstitucional el contrato. Esta sentencia es un ejemplo notable de acción ciudadana y tiene una importancia significativa para el procedimiento de arbitraje secreto iniciado por First Quantum contra el gobierno panameño. En este procedimiento, la empresa solicita una indemnización por la suspensión del contrato.

Llamamiento a la acción

Aunque nuestro camino como creadores de cambio y activistas acaba de empezar, creemos que el cambio viene de decir la verdad al poder. Como dos jóvenes panameños, invitamos a otros jóvenes a cuestionar las normas y a las autoridades para incitar realmente al cambio. Encuentra tu por qué, pregúntate por qué luchas y por qué es importante.

La concienciación sobre la minería y la explotación de recursos en Panamá no soluciona inmediatamente este problema, pero es un gran paso que hace que las grandes empresas se responsabilicen de los problemas medioambientales y sociales que están causando. Por lo tanto, pasar a la acción participando en protestas y manifestaciones, publicando en las redes sociales y empezando con proyectos a menor escala en las comunidades te ayudará a convertirte en activista.

Somos jóvenes, apasionados y nos mueve el objetivo de la igualdad. Animamos encarecidamente a todo el mundo a que aprenda, se manifieste y apoye acciones para detener el ecocidio con el fin de promover un futuro sostenible y justo.

Obras citadas:

Ciencia en Panamá - Popularizamos la Ciencia y la Tecnología en Panamá, https://www.cienciaenpanama.org/. Consultado el 18 de noviembre de 2023.

Stop Ecocidio Internacional, https://www.stopecocide.earth/. Consultado el 18 de noviembre de 2023.

Hilaire, Valentine, y Divya Rajagopal. "La minera First Quantum afronta un camino pedregoso mientras los manifestantes de Panamá se atrincheran". Reuters, 2 de noviembre de 2023, https://www.reuters.com/markets/commodities/miner-first-quantum-faces-rocky-road-panama-protesters-dig-2023-11-01/. Consultado el 18 de noviembre de 2023.

"Mineral requirements for clean energy transitions - The Role of Critical Minerals in Clean Energy Transitions - Analysis - IEA". Agencia Internacional de la Energía, https://www.iea.org/reports/the-role-of-critical-minerals-in-clean-energy-transitions/mineral-requirements-for-clean-energy-transitions. Consultado el 18 de noviembre de 2023.

"Minera Panamá Operations Posee Severe Threat to People, Wildlife, and Planetary Health, Group of International and Local Organizations Say". American Bird Conservancy, 17 de noviembre de 2023, https://abcbirds.org/news/panama-mining-2023/. Consultado el 18 de noviembre de 2023.

Mojica, Bienvenido y Erick Santos. "RATIFICAN CONTRATO CON MINERA PANAMÁ S.A.". Asamblea Nacional de Panamá, 20 de octubre de 2023, https://www.asamblea.gob.pa/noticias/ratifican-contrato-con-minera-panama-sa. Consultado el 18 de noviembre de 2023.

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Penalizar el ecocidio: negocios dentro de los límites planetarios

Este post fue escrito por Sue Miller, Directora de Redes Mundiales de Stop Ecocide International, y publicado originalmente por la Confederación de la Industria Británica (CBI).

Esta entrada forma parte de un Blog de invitadxs que pretende ser un espacio dedicado a los numerosos movimientos/campañas de todo el mundo que se enfrentan a la destrucción de los ecosistemas para que compartan sus historias, relatos y perspectivas.

Este post fue escrito por Sue Miller, Directora de Redes Mundiales de Stop Ecocide International, y publicado originalmente por la Confederación de la Industria Británica (CBI).


Negocios dentro de los límites planetarios: cómo puede ayudar una nueva ley de ecocidio

Imaginemos un mundo en el que el comercio y la Tierra puedan prosperar; en el que empresas responsables con el medio ambiente no se vean perjudicadas por quienes externalizan sus verdaderos costes a la naturaleza; en el que las empresas puedan invertir en un futuro estable y sostenible.

Ese mundo podría estar más cerca de lo que crees.

La Soil Association se enorgullece de ser miembro de la red Business for Ecocide Law y firmante de la Carta Abierta a las Empresas de Stop Ecocidio Internacional.

¿Qué es el ecocidio?

Ecocidio -del griego "oikos" que significa hogar y del latín "cadere", matar- es una palabra que está ganando actualidad e impulso a medida que empezamos a comprender colectivamente el daño que estamos haciendo a la Tierra. El ecocidio se produce porque la ley no lo previene adecuadamente.

Las leyes que rigen la actividad comercial se crearon en una época en que los recursos de la Tierra parecían infinitos y la propia Tierra invencible. Sin embargo, no han evolucionado al ritmo de nuestra capacidad de destrucción y ya no son capaces de evitar los daños que estamos causando. El deber para con los accionistas sigue prevaleciendo sobre el deber para con el planeta. Las inversiones y las subvenciones siguen fluyendo hacia actividades que perjudican en lugar de curar. Estamos atrapados en un ciclo de extracción implacable, producción masiva y eliminación irreflexiva sin tener realmente en cuenta el efecto que está teniendo sobre la Tierra. Las leyes, pactos, tratados y acuerdos existentes han demostrado su ineficacia contra las peores prácticas. Todas las multas o indemnizaciones civiles impuestas a las empresas contaminantes -si es que se imponen- se consideran un gasto empresarial, empequeñecido por los enormes beneficios que se obtienen.

Ecosia, empresa tecnológica líder en pensamiento, ha sido durante mucho tiempo una ferviente defensora del creciente movimiento mundial para criminalizar el ecocidio.

Si queremos proteger la Tierra de una destrucción irreflexiva y temeraria, tenemos que cambiar las reglas.

En junio de 2021, un Grupo de Expertos Independientes de juristas internacionales (GIEI), convocado por la la Fundación Stop Ecocidio, publicó una definición de un nuevo crimen internacional de ecocidio, concebida para ser añadida como enmienda al documento fundacional de la Corte Penal Internacional (CPI). Allí ocuparía su lugar junto a los crímenes que la humanidad considera más atroces: genocidio, crímenes contra la humanidad, crímenes de guerra y crímenes de agresión. Y, como estamos empezando a ver, los efectos de un daño medioambiental grave pueden ser tan dañinos como el genocidio.

La definición es la siguiente:

"ecocidio": actos ilícitos o arbitrario cometidos a sabiendas de que existe una probabilidad sustancial de que esos actos causen daños graves y generalizados o a largo plazo al medio ambiente.

Está concebida para disuadir de los peores actos de daño ambiental mediante la creación de una responsabilidad penal personal para los principales responsables de la toma de decisiones detrás de ellos, creando una línea más allá de la cual la actividad comercial nociva se considera inaceptable y trasladándola a un lugar más seguro y sostenible donde todos puedan prosperar.

Objetivo final: el ecocidio como derecho internacional 

El objetivo último es consagrar la ley de ecocidio en la CPI, donde creará una salvaguarda internacional y transfronteriza. Sin embargo, tras la publicación de la definición del IEP, varios países ya han decidido impulsar sus propias leyes nacionales sobre ecocidio basándose en ella. Bélgica, Países Bajos, España, Italia, México y Brasil tienen proyectos de ley sobre ecocidio en trámite parlamentario. Chile, cuando recientemente consolidó las leyes medioambientales existentes dentro de su constitución, incorporó elementos de la definición de la IEP. Y, en el momento de redactar este artículo, la Unión Europea está estudiando un nuevo delito medioambiental basado en la definición. 

Los inversores también lo quieren

No sólo los gobiernos ven la necesidad de una ley de ecocidio. También los inversores la reclaman. La Red Internacional de Gobierno Corporativo, una organización cuyos miembros gestionan 70 billones de dólares, ha hecho declaraciones tanto en la COP26 como en la COP27 pidiendo a los gobiernos y a los organismos normativos que apoyen la creación de un nuevo delito internacional de ecocidio.

"empresas que trabajan para ofrecer una economía más sostenible se beneficiarían en más de un sentido si el ecocidio se reconociera como delito" - Hans Stegeman, Economista Jefe, Triodos Bank

Qué significa el ecocidio para las empresas 

Para la mayoría de las empresas no hay nada que temer de la ley de ecocidio y mucho que ganar. Está concebida para sancionar únicamente a los responsables de los daños ambientales más graves y no tendrá carácter retroactivo. Es muy improbable que las empresas bien gestionadas y que actúen con la diligencia debida estén en el punto de mira.

Lo que hará es crear unas condiciones más equitativas y desincentivar la toma de decisiones perjudiciales. Garantizará que las empresas que se esfuerzan por operar de forma sostenible dejen de verse perjudicadas por las que toman atajos y les dará más confianza en la integridad de sus cadenas de suministro. La ley ecocida incentivará las prácticas responsables y canalizará la inversión y el talento hacia la innovación saludable. Y, a nivel personal, ayudará a proteger nuestro único hogar, nuestra salud, nuestro futuro y el de nuestros seres queridos.  

La ley del ecocidio es una ley para nuestro tiempo y está en camino.  

 Para más información sobre la ley de ecocidio, visite elsitio web Stop Ecocidio Internacional .

También puede firmar nuestra Carta Abierta Empresarial en la que pedimos a los gobiernos del mundo que apoyen la creación de un delito internacional de ecocidio. Si cree que su empresa se beneficiaría de una sesión informativa más exhaustiva sobre el derecho relativo al ecocidio, envíe un correo electrónico a sue@stopecocide.earth.

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40 días para la COP: una llamada a la acción de los jóvenes

Este post ha sido escrito por Reagan Elijah, politólogo, codirector de Youth For Ecocide Law Africa y cofundador de Debt For Climate Uganda.

Esta entrada forma parte de un Blog de invitadxs que pretende ser un espacio dedicado a los numerosos movimientos/campañas de todo el mundo que se enfrentan a la destrucción de los ecosistemas para que compartan sus historias, relatos y perspectivas.

Este blog invitado fue escrito por Reagan Elijahpolitóloga, codirectora de Youth For Ecocide Law Africa y cofundadora de Debt For Climate Uganda.


La COP es el evento anual en el que miles de personas de todo el mundo se reúnen para debatir soluciones a la crisis climática mundial. Este año se celebra la 28ª COP en los Emiratos Árabes Unidos, y su presidente es Sultan Al Jaber, director de la mayor petrolera del país.

¿Qué significa esto?
Significa que existe un riesgo significativo de que no cambie gran cosa siguiendo las pautas de anteriores COP. Lo más probable es que sean más de las mismas promesas vacías y bonitos discursos.

Así pues, qué es lo que hay que cambiar.
En mi opinión, tenemos que cambiar el tono de esta conversación y convertirla en un diálogo más sólido y duradero.

¿Cómo?
Estoy de acuerdo con mi colega Jojo Mehta en que lo que falta en la agenda medioambiental es el derecho penal. El derecho penal es lo que utilizamos para trazar la línea roja entre lo que es moralmente aceptable y lo que no lo es. Y lo que está ocurriendo con la naturaleza y los ecosistemas es moralmente inaceptable.

La justicia climática, en el sentido del fondo propuesto para pérdidas y daños, la financiación climática y los objetivos del Acuerdo de París de 2015 de eliminar progresivamente los combustibles fósiles y mantener la temperatura global por debajo de 1,5 grados centígrados, no tendrá mucho sentido a menos que se centre en un delito internacional de ecocidio según el Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional. La palabra justicia y derecho penal aquí son muy importantes porque durante mucho tiempo se ha hablado de sostenibilidad sin justicia. No podemos hablar de alcanzar la justicia climática sin un derecho penal internacional que proteja esta justicia deseada. El delito de ecocidio es algo que socava la justicia y el orden jurídico internacional establecido para promover la justicia climática, la justicia social y la justicia medioambiental. Esa es la tragedia del ecocidio.

¿Qué debemos hacer entonces?
En el camino hacia la COP28, debemos crear conciencia pública y esta conciencia pública no consiste simplemente en decirle a la gente que el cambio climático es malo porque todo el mundo, incluidos los líderes mundiales y los contaminadores, saben que es malo. Lo que necesitamos es un cambio de comportamiento, algo que la criminalización ofrecerá.

Debemos garantizar que quienes se dedican a la destrucción masiva de la naturaleza y los ecosistemas sean castigados conforme a la ley. Debemos modificar el estatuto de Roma para reconocer el ecocidio como el 5º crimen internacional contra la paz junto con el genocidio, los crímenes de guerra, los crímenes contra la humanidad y la agresión.

Debemos difundir este mensaje y esta solución en la COP28. No existe un derecho penal fundacional que impida la destrucción masiva de la naturaleza. Lo que tenemos que hacer ahora mismo es cambiar la ley para proteger la naturaleza. No hay forma de erradicar el ecocidio y todas las injusticias asociadas al cambio climático sin cambiar el comportamiento de la gente.

Por lo tanto, debemos crear un entorno en el que, a través de una nueva legislación reconocida internacionalmente, los daños masivos al medio ambiente se conviertan en moralmente inaceptables. Esto es algo que va a persistir en la diplomacia climática y en el marco de la CMNUCC, pero sólo a través de la Corte Penal Internacional podremos garantizar una verdadera salvaguarda.

He estado buscando la verdadera definición del mal y creo que he llegado a definirla. El mal es la falta de empatía. Es la falta de sentimientos hacia tus semejantes y su entorno. Esto es lo que une a todos los perpetradores a lo largo de la historia.

En la COP28, los defensores de la justicia climática y ecológica deben aprovechar al máximo la oportunidad y hacer que cada conversación sobre ecocidio se convierta en ley. Cada semana se proponen o avanzan nuevos proyectos de ley sobre ecocidio en todo el mundo. El impulso está de nuestro lado, pero el tiempo no. Hago un llamamiento a todos los asistentes a la COP28 para que utilicen su influencia y acceso para presionar a los Estados miembros de la Corte Penal Internacional para que hagan algo valiente y apoyen el reconocimiento de un delito internacional de ecocidio.

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Hemos entrado en la era de la "guerra climática

Este post fue escrito por Richard Rogers, Director Ejecutivo de Climate Counsel, y Moneim Adam, Director Ejecutivo de Sudan Human Rights Hub, y publicado originalmente en Euronews. 

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Este post fue escrito por Richard Rogers, Director Ejecutivo de Climate Counsel, y Moneim Adam, Director Ejecutivo de Sudan Human Rights Hub, y publicado originalmente en Euronews. 


Hemos entrado en la era de la "guerra climática" - Nuestras instituciones mundiales deben estar a la altura del desafío

 Por Richard J Rogers y Moneim Adam

Durante décadas, los expertos en derechos humanos han pronosticado la perspectiva de conflictos humanos violentos alimentados por las tensiones medioambientales del cambio climático. El clima extremo y la escasez de recursos son ahora un factor importante en el aumento de los conflictos en todo el mundo. 

La dependencia de la civilización de un mundo estable y sano ha sido durante mucho tiempo uno de los temas favoritos de los escritores de ciencia ficción, con desastres medioambientales que desencadenan conflictos en los mundos distópicos de escritores como Margaret Attwood, Octavia E. Butler e incluso el Dr. Seuss. Pero aunque estas "guerras ecológicas" de ficción se escribieron a menudo como alegoría o advertencia de futuros peligros, ahora son una realidad.

La ONU reconoce que el cambio climático es un "multiplicador de amenazas" para la paz y la seguridad internacionales. Esto significa que el cambio climático exacerba las condiciones que pueden conducir a un conflicto y acelera su escalada hasta la guerra. Mientras que algunas partes del mundo, a menudo las más responsables de la crisis climática, han estado en gran medida aisladas de estos efectos, hay un gran número de personas que viven en zonas del planeta que están experimentando ahora mismo la desestabilización y la violencia inducidas por el clima.

Ya en 2007, el entonces Secretario General de la ONU, Ban Ki-Moon, identificó el cambio climático como una de las causas principales de la actual tragedia de Darfur (Sudán). Con una pluviosidad anual en constante descenso en la región desde la década de 1980, la escasez de agua es la causa principal de la guerra que dura ya medio siglo, con más de 300.000 darfurianos muertos y dos millones de desplazados.

Desde que el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas remitió el conflicto a la Corte Penal Internacional (CPI), varias personas han sido acusadas. La CPI debería utilizar sus recursos y experiencia para analizar la conexión entre el estrés hídrico y la violencia en Darfur, y dar a conocer esta preocupante tendencia.

Los conflictos armados son, a su vez, fuente y motor de daños medioambientales. En Sudán, por ejemplo, los grupos armados que buscan sacar provecho de la extracción ilegal de oro han contaminado (con la ayuda del Grupo Wagner) la tierra y las fuentes de agua de comunidades enteras con mercurio y cianuro.

Un ejemplo más reciente puede verse en el actual conflicto de Ucrania, donde las consecuencias medioambientales de la guerra se dejarán sentir probablemente durante generaciones. La destrucción de la presa de Nova Kakhovka, cuyo impacto ecológico se ha calificado repetidamente de "ecocidio", inundó vastas zonas de tierra fértil e hizo saltar las alarmas sobre el vertido de agrotóxicos y productos petroquímicos en el Mar Negro. 

La CPI ya dispone de los medios legales para procesar a los responsables de estos crímenes. El Estatuto de Roma incluye múltiples disposiciones sobre atrocidades contra el medio ambiente tanto en tiempo de guerra como de paz, pero el tribunal no ha enjuiciado ni un solo caso centrado en daños masivos al medio ambiente.

En nuestra calidad de abogados y defensores de los derechos humanos, pedimos a la Fiscalía que empiece a hacer pleno uso de las facultades que le confiere el Estatuto de Roma para examinar el papel que desempeña el cambio climático en el impulso y la intensificación de los conflictos, y que dé prioridad al enjuiciamiento de los delitos medioambientales masivos con respecto a todas las situaciones, incluida la de Darfur.

Esto incluye nombrar a un experto interno en seguridad climática para que asesore sobre estos casos; mejorar las políticas y los métodos de investigación para incluir un enfoque forense basado en la seguridad climática; presentar pruebas que demuestren cómo las cuestiones relacionadas con la seguridad climática son relevantes para los delitos que se persiguen; y dar prioridad al enjuiciamiento de los delitos atroces contra el medio ambiente.

La guerra de Sudán es un recordatorio alarmante y premonitorio de la relación causal entre el estrés y la devastación medioambientales y los conflictos humanos. Para que la CPI mantenga su eficacia al servicio de la humanidad mientras navegamos por una nueva realidad, marcada por incertidumbres ecológicas y climáticas, el Estatuto de Roma debe modificarse para reconocer un delito autónomo que tenga por objeto prevenir y castigar los daños más graves a la naturaleza: el ecocidio.

Enlace a la carta abierta completa aquí

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Declaración Universal de los Derechos de los Océanos y Ley Océano por Ecocidio

Este post fue publicado originalmente por Ocean Vision Legal y fue co-escrito por: Michelle Bender*, Jojo Mehta**, Antoinette Vermilye***, Dra. Anna von Rebay*.

*Ocean Vision Legal, **StopStop Ecocidio Internacional, ***Fundación Gallifrey

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El cambio de paradigma para una conexión saludable de las personas
con el océano en este Decenio Oceánico de la ONU

Autores: Michelle Bender*, Jojo Mehta**, Antoinette Vermilye***, Dra. Anna von Rebay*
*Ocean Vision Legal, **StopStop Ecocidio Internacional, ***Gallifrey Foundation



El Océano es el sistema de soporte vital del planeta y el bienestar humano está inextricablemente ligado a la salud, integridad y funcionamiento del Océano. Sin embargo, a pesar de la multitud de leyes y políticas internacionales para proteger y conservar el Océano, la biodiversidad marina sigue disminuyendo.¹ Las protecciones medioambientales existentes a menudo no se respetan o se aplican mal para evitar la grave contaminación y los daños a los ecosistemas marinos.

Muchos Estados, así como ONG, abogados, académicos, científicos, movimientos de base y un número cada vez mayor de voces de los sectores empresarial y financiero se manifiestan a favor de marcos jurídicos más sólidos y de la rendición de cuentas. En respuesta a la creciente "crisis medioambiental", han surgido recientemente dos estrategias para proporcionar una protección más holística y eficaz del medio marino: "Hacia una Declaración Universal de los Derechos Oceánicos" (UDOR) y la "Red deDerecho Oceánico por el Ecocidio " (OEL).

Dado que ambos marcos pretenden remodelar fundamentalmente los valores y principios subyacentes que guían las decisiones, Jojo Mehta, cofundador de Stop Ecocidio Internacional , y Michelle Bender, fundadora y creadora de "Ocean Rights", exploran en esta entrada de blog su punto de vista sobre los valores compartidos de ambos marcos.

Derechos de la Naturaleza y Ley de Ecocidio

La forma en que valoramos el océano está estrechamente vinculada a la forma en que la sociedad gestionará nuestra actividad en el medio marino.² UDOR y OEL son ramificaciones de marcos más amplios denominados Derechos de la Naturaleza (RoN) y Derecho del Ecocidio, respectivamente. Ambas son dos vías jurídicas emergentes e innovadoras que persiguen un replanteamiento sistémico de los sistemas jurídicos occidentales utilizando una ética ecocéntrica: reorientar la ética medioambiental lejos de una visión antropocéntrica del mundo (es decir, los seres humanos son percibidos como centrales, separados y dominantes sobre la Naturaleza) y catalizar una transformación en la forma en que la humanidad se relaciona con la Naturaleza, la valora y la utiliza (es decir, la humanidad como una de las muchas especies interdependientes en todo el ecosistema natural). Aunque este valor fundamental es inherente a ambas campañas, la principal diferencia radica en cómo cada marco logra ese cambio de paradigma.

Los Derechos de la Naturaleza (DnN) se entienden en sentido amplio como un marco jurídico emergente que reconoce la Naturaleza como sujeto de Derechos con valor intrínseco, y la responsabilidad de la humanidad de ser administradores eficaces en nombre de las generaciones presentes y futuras de toda forma de vida. El mecanismo para reorientar los valores y la ética que subyacen en nuestros sistemas jurídicos reside, por tanto, en la provisión de "Derechos" o "personalidad jurídica" que estructuran la forma de los gobiernos y el contenido (y, por tanto, la aplicación y la eficacia) de la ley.³ La provisión de "Derechos" permite a la sociedad relacionarse con la Naturaleza como una entidad con valor intrínseco digna de protección en sí misma,⁴ en lugar de un recurso para beneficio y utilidad humanos. De hecho, como sujeto de Derechos, el ámbito de protección de la Naturaleza se amplía y la Corte Interamericana de Derechos Humanos ha señalado que esta protección existe incluso en ausencia de la certeza o la evidencia de un riesgo para las personas.⁵

Aproximadamente el cinco por ciento de las leyes y políticas sobre los Derechos de la Naturaleza son específicas del Océano, y para colmar esta laguna con una aplicación y una atención específicas a la realidad supranacional del panorama político del Océano, está la UDOR. La Declaración Universal de los Derechos Humanos (DUDH) esboza normas fundamentales, valores compartidos y principios que aportan coherencia y ayudan al desarrollo y la interpretación de la legislación nacional.

A semejanza de la Declaración Universal de los Derechos Humanos (DUDH), el objetivo de la DUDH es esbozar principios fundamentales que sirvan de base a todas las agendas oceánicas basadas en el respeto de los derechos inherentes a los océanos y en la inseparable relación hombre-océano.

Así, la UDOR, un llamamiento a la acción liderado por The Ocean Race, Earth Law Center y el Gobierno de Cabo Verde, es un marco ético que pretende garantizar que la voz, los intereses y las necesidades de los océanos estén representados en la toma de decisiones desde el ámbito internacional al local.

A través de la la Fundación Stop Ecocidioun grupo internacional de expertos independientes acordó en 2021 una definición de Ecocidio que significa "los actos ilícitos o arbitrario cometidos a sabiendas de que existe una probabilidad sustancial de que esos actos causen daños graves y generalizados o a largo plazo al medio ambiente". El objetivo es introducir el ecocidio como quinto delito del Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional (CPI).

El reconocimiento jurídico del "ecocidio" como delito a escala internacional podría contribuir en gran medida a modificar las actitudes y orientar los comportamientos ante las (graves) amenazas que se ciernen sobre el principal sistema de sustento de la vida en la Tierra: el océano. 

A menudo se piensa en el derecho penal como un marco para el castigo, pero el homicidio no es primero una ley para castigar a los asesinos, es una ley para impedir que la gente cometa asesinatos. El mecanismo para reorientar los valores y la ética que subyacen a nuestros sistemas jurídicos reside, por tanto, en el poder moral sustancial e inmediato que se deriva de la penalización de los daños nocivos e irreversibles a la Naturaleza.

La Ocean for Ecocide Law Network comprende una red en rápida expansión y crecimiento de organizaciones, empresas y comunidades que viven y trabajan con el Océano, creada por Stop Ecocidio Internacional, que pide a los gobiernos que apoyen la inclusión del Ecocidio en el Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional, y que se comprometan positivamente en la creciente conversación global para hacer de esto una realidad.

El reconocimiento internacional del ecocidio proporcionará el marco legal que tanto se necesita para proteger la fauna oceánica y los ecosistemas marinos de los peores daños. Garantizará que la regulación y la protección de los océanos se tomen mucho más en serio al más alto nivel, impulsando una mejor diligencia debida y estimulando un cambio estratégico positivo.

Principios compartidos

Tal y como se ha reflejado anteriormente, ambos marcos van más allá y son más profundos que su uso inicial de "derechos" y "derecho penal", respectivamente, y remodelan fundamentalmente los valores y principios subyacentes que guían la toma de decisiones. En el contexto del derecho y la política oceánicos, ambos marcos infunden:

  • Responsabilidad y administración: El reconocimiento de que el Océano tiene límites que hay que respetar y que la humanidad tiene la responsabilidad y la obligación de proteger y preservar el medio marino en beneficio a largo plazo de toda la vida del planeta.

  • Protección: Ampliar y priorizar la salvaguarda de los ecosistemas marinos, arraigada en el valor intrínseco del Océano, como esencial para el bienestar de toda la vida en la Tierra.

  • Precaución y prevención: Cuando existan amenazas de daños graves o irreversibles, la falta de plena certeza científica exigirá la adopción de medidas de precaución, y la prevención de los daños al Océano antes de que se produzcan. En caso de duda, prevalecerá la decisión que mejor garantice los Derechos de la Naturaleza y su preservación, dando preferencia a las alternativas menos perjudiciales (en caso de duda, errar del lado del Océano o "in dubio, in favorem Oceani").

  • Equidad y justicia: Un cambio de poder hacia las comunidades y partes interesadas más afectadas por la mala gobernanza y la capacidad de responsabilizar a particulares, gobiernos y empresas de las acciones que causen una violación de los Derechos del Océano o un daño sustancial al medio marino.

  • Inversión de la carga de la prueba: La carga de la prueba recae en los agentes que deben demostrar que sus actividades (y sus externalidades) no causarán daños graves al medio marino.

  • Interconexión y humildad: Un enfoque de "Un Océano" que reconoce que la identidad humana es una extensión de todo lo que nos rodea, y que nuestras acciones e impactos trascienden las fronteras imaginarias de Oceanía.

Las dos caras de la moneda

No es necesario que exista uno de los dos, RdN o EL, para que se aplique el otro. No obstante, a menudo se hace referencia a ambos marcos como "dos caras de la misma moneda" o se consideran dos formas distintas de lograr la protección efectiva de la Naturaleza. Al igual que el delito de asesinato (una cara de la moneda) previene las infracciones del derecho a la vida (la otra cara), el ecocidio puede ayudar a prevenir las infracciones de los derechos de la Naturaleza. El examen de un caso relacionado con tiburones en Ecuador demuestra esta analogía en la práctica:

En 2017, se encontró un buque chino con más de 6.000 tiburones muertos (o 300 toneladas) de donde estaban protegidos en la Reserva Marina de Galápagos.⁷ En Ecuador, las RdN fueron reconocidas en la enmienda constitucional de 2008. Además, se prohíbe la pesca industrial en la Reserva Marina de Galápagos, se prohíben las artes y sistemas de pesca diseñados para capturar tiburones, incluido el aleteo de tiburones, y el artículo 247 del Código Orgánico Integral Penal de Ecuador penaliza el ecocidio, incluidos los delitos contra la biodiversidad, la Naturaleza o pachamama, y la flora y fauna silvestres.⁸

En la Constitución de Ecuador, la Naturaleza, o Pachamama, tiene Derecho a "mantener y regenerar sus ciclos, estructuras, funciones y procesos evolutivos"; tiene Derecho a ser restaurada y esta restauración será aparte de la compensación a las personas; y "el Estado aplicará medidas preventivas y restrictivas sobre las actividades que puedan conducir a la extinción de especies, la destrucción de ecosistemas y la alteración permanente de los ciclos naturales (Art. 71-74). De este modo, la Ley de Ecocidio se establece en la Constitución de Ecuador junto con los Derechos de la Naturaleza. En consecuencia, se requiere precaución y prevención para evitar el Ecocidio y la vulneración de los Derechos de la Naturaleza.

En su sentencia, el Tribunal Supremo ecuatoriano dictaminó que el capitán y la tripulación debían recibir penas de prisión y una multa de 6.137.753,42 dólares, señalando que la Naturaleza, como sujeto de Derechos, tiene derecho a la reparación integral del Delito (debido al Derecho Constitucional), y que la cantidad necesaria como indemnización depende de los daños materiales e inmateriales causados.⁹ El tribunal también señaló el grave impacto medioambiental que la eliminación de tiburones tiene en el ecosistema y las importantes funciones que desempeñan como depredadores ápice al mantener los ecosistemas marinos en buen estado de salud. En consecuencia, el ámbito de protección del tiburón se amplió tanto a través del reconocimiento legal como sujeto de Derechos, como a través de la penalización de un Delito contra la Naturaleza, al igual que la violación del Derecho a la Vida está penalizada por la ley.

Hacia un cambio de paradigma

Por lo tanto, ni la RM ni la Ley de Ecocidio pretenden reducir los Derechos Humanos, sino más bien proporcionar una forma de control y equilibrio para mantener la integridad y funcionalidad del Medio Ambiente con el fin de garantizar la realización efectiva de los Derechos Humanos ahora y en el futuro. En el contexto de la gobernanza de los océanos, ambos marcos exigen que la humanidad equilibre respetuosamente la explotación de los océanos con la responsabilidad de preservar su salud.

La comunidad internacional, incluidas las Naciones Unidas, sigue pidiendo un cambio transformador que se aleje de las prácticas habituales y ha señalado que, para mantener la calidad de vida que los océanos han proporcionado a la humanidad, es necesario un cambio en la forma en que los seres humanos ven, gestionan y utilizan los océanos y los mares.¹⁰ En este tercer año del Decenio de las Naciones Unidas para los Océanos, el cambio de paradigma ya se está produciendo. La RdN ha surgido en casi cuarenta países en forma de enmiendas constitucionales, leyes nacionales, decisiones judiciales, acuerdos de tratados, leyes locales y resoluciones: por ejemplo, en Ecuador, Uganda, México, España, India, Colombia, Panamá, Belice, Nueva Zelanda y Estados Unidos.

Desde 2021, decenas de países están debatiendo una ley contra el ecocidio. Bélgica está legislando y recientemente se han anunciado proyectos de ley en Brasil, Países Bajos y México. La República de Vanuatu y Ucrania, ambas víctimas de una grave destrucción del medio ambiente (por el cambio climático y los conflictos, respectivamente), son firmes defensoras. El delito internacional de ecocidio también cuenta con el apoyo de:

  • la Unión Europea (27 Estados), que negocia actualmente con la Comisión y el Consejo de la UE la inclusión de los delitos ecológicos en la legislación de la UE;

  • el Consejo de Europa (46 Estados);

  • la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (57 Estados);

  • la Unión Interparlamentaria (179 Estados);

  • la Red Internacional de Gobierno Corporativo (los principales gestores de activos del mundo); y

  • el Consejo Mundial de Iglesias.

Las redes de jóvenes, religiosas e indígenas han respaldado la iniciativa, al igual que las asambleas de ciudadanos y las redes empresariales y de inversión.

Apoye las campañas

Las narrativas de o lo uno o lo otro son falsas: o proteger los Derechos Humanos o los Derechos de la Naturaleza, y o promover el crecimiento económico y dañar el Medio Ambiente o cesar el desarrollo económico y proteger el Medio Ambiente. Los Derechos de los Océanos y la Ley de Ecocidio son un ganar-ganar para toda la vida en el planeta.

Únete a ellos hoy mismo:

La Declaración Universal de los Derechos Oceánicos es una iniciativa internacional liderada por el gobierno de Cabo Verde, The Ocean Race y Earth Law Center, para lograr la aprobación de una Declaración Universal de los Derechos Oceánicos para 2030, con el objetivo a corto plazo (septiembre de 2023) de introducir un texto en la resolución general de la AGNU de este año sobre "Los océanos y el derecho del mar"¹¹.

Si tiene preguntas, envíe un correo electrónico a Johan Strid(johan.strid@theoceanrace.com), Michelle Bender(michelle@oceanvisionlegal.com) o Rachel Bustamante(rbustamante@earthlaw.org).

Océano por la Ley del Ecocidio es una red cada vez mayor de organizaciones, agentes de cambio y personas influyentes que han unido sus fuerzas para apoyar esta iniciativa que pide a los gobiernos que apoyen la inclusión del ecocidio en el Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional, y que participen positivamente en el creciente debate mundial para que esto se haga realidad.

Envíe un correo electrónico a Stop Ecocidio Internacional (press@stopecocide.earth) si tiene preguntas.


[1] Índice Planeta Vivo, disponible en http://www.livingplanetindex.org/projects?main_page_project=BluePlanetReport&home_flag=1

[2] Kai MA Chan y otros, "¿Por qué proteger la naturaleza? Rethinking Values and the Environment' (2016) 113 Proceedings of the National Academy of Sciences 1462, disponible en https://pnas.org/doi/full/10.1073/pnas.1525002113.

[3] Leif Wenar, "Derechos", Stanford Encyclopedia of Philosophy (2020), disponible en: https://plato.stanford.edu/entries/rights/.

[4] Marceau J y Stilt K, "Rights of Nature, Rights of Animals", 2021, Harvard Law Review, disponible en: https://harvardlawreview.org/2021/03/rights-of-nature-rights-of-animals/.

[5] Corte Interamericana de Derechos Humanos, Opinión Consultiva OC- 23/17, 'Medio Ambiente y Derechos Humanos', solicitada por la República de Colombia, 15 de noviembre de 2017, párr. 62.

[6] Jojo Mehta, Legally protecting nature: The power of recognising 'Ecocide, 2023, disponible en: https://diem25.org/legally-protecting-nature-the-power-recognising-ecocide/.

[7] Carr L et. al, "Illegal Shark Fishing in the Galapagos Marine Reserve", 2013, Marine Policy. 

[8] Código Orgánico Integral Penal, 2014, Capítulo 4; CEDENMA, Breve Jurídico sobre Derechos de la Naturaleza en el Contexto de Galápagos, 2016, disponible en: https://ecojurisprudence.org/wp-content/uploads/2022/02/Legal-arguments-for-the-shark-case-in-Ecuador.pdf.

[9] Demanda de Ecuador contra el transporte ilegal de tiburones en las Galápagos, disponible en: https://ecojurisprudence.org/initiatives/illegal-transport-of-sharks-galapagos/.

[10] Plataforma de Conocimiento sobre Desarrollo Sostenible, Naciones Unidas, disponible en: https://sustainabledevelopment.un.org/topics/oceanandseas.

[11] Las resoluciones ómnibus son más detalladas y largas que las resoluciones ordinarias. Pueden abarcar muchas cuestiones diferentes en un solo documento y proporcionar información más específica sobre un tema concreto. Suelen respaldar los procesos y Resoluciones existentes, pero a menudo instan a los Estados o Gobiernos a tomar medidas adicionales. Al igual que las Resoluciones, las Resoluciones Ómnibus pueden ser utilizadas por diferentes órganos de la ONU y para una gran variedad de asuntos/temas. Más información en Alana Capell, ¿Qué es una resolución ómnibus?, Centro de Recursos sobre los Derechos del Niño, disponible en:https://resourcecentre.savethechildren.net/document/what-omnibus-resolution/Cada año, la Asamblea General adopta una resolución titulada "los océanos y el derecho del mar", por ejemploN2300478.pdf (un.org).


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Robin Gairdner Robin Gairdner

Caminar por la Tierra: De Oxford a Loch Lomond (¡y vuelta!)

Esta entrada del blog ha sido escrita por Zoe Bicât, autora publicada de poemas y canciones, terapeuta de rehabilitación de lesiones y profesora de Tai Chi Qigong.

Esta entrada forma parte de un Blog de invitadxs que pretende ser un espacio dedicado a los numerosos movimientos/campañas de todo el mundo que se enfrentan a la destrucción de los ecosistemas para que compartan sus historias, relatos y perspectivas.

Allär är ä' de Owl Light Trio
https://www.owllighttrio.com

Esta entrada del blog ha sido escrita por Zoe Bicât, autora publicada de poemas y canciones, terapeuta de rehabilitación de lesiones y profesora de Tai Chi Qigong.


Los primeros pasos

El 8 de junio de 2022 pisé el cálido asfalto de un carril bici a lo largo de una carretera A en Oxford, pasando por delante de un túnel de lavado donde el chorro de los limpiadores a presión estallaba sobre el capó de un Audi formando una fina niebla. Llevaba una mochila ligera a la espalda y una cuerda de dos metros en la mano. En el extremo de la cuerda había una mula de la tranquilidad rural del sur de Francia, que llevaba 55 kilos en alforjas sobre las barras transversales de su montura de carga. Llevábamos tres años entrenándonos para este momento. Nos dirigíamos al norte, y caminaríamos codo con codo hasta llegar a Loch Lomond, en Escocia.

Han pasado casi 10 meses desde que la mula Falco y yo dimos los primeros pasos de nuestra "Marcha por la Tierra" de Oxford a Loch Lomond. Pasamos la mayor parte de julio esperando a que me recuperara del Covid en Warwickshire. A principios de octubre del año pasado, tras casi 800 kilómetros de caminata con Falco, me paré en la orilla del Loch y di gracias por la vida y el trabajo de Polly Higgins, y por toda la vida que alberga la Tierra. Tras un descanso invernal en los Trossachs, nos disponemos a recorrer la etapa de vuelta de nuestro viaje. Este mes partimos del pueblo de Etal, en Northumberland.

Walk for Earth surgió del deseo de expresar mi amor por el mundo vivo y de recorrer físicamente esta conexión como una peregrinación, con un compañero más que humano. Sabía que amaba la biodiversidad de la Tierra; que mi sentido del asombro y la alegría de mi propia autenticidad siempre habían surgido de esos momentos de inmersión en los que comprendía que no sólo estaba cerca de esta belleza, sino que formaba parte de su flujo vivo. ¿Qué canción podría cantar con mi cuerpo, este pedacito de toda una vida planetaria, que elevara una plegaria contra su pérdida? Cuando me enteré del trabajo de Polly y Jojo Mehta en 2017, supe que la marcha sería en apoyo de la ley contra el ecocidio, y un intento de ofrecer a la gente formas creativas y democráticas de comprometerse con su progreso. Con el generoso apoyo de más de 200 donantes de crowdfunder, la tolerancia y la ayuda práctica de todos mis amigos, y la habilidad y convicción de dos increíbles voluntarias Katie Smirnova y Lily Nicholson, juntos hemos podido poner en marcha Walk for Earth.

A la mula le encanta

La forma en que cambian las caras de la gente cuando conocen a Falco es para mí la prueba de que los humanos sentimos una profunda resonancia con el mundo más-que-humano, que nos hace felices. Nos sentimos más conectados unos con otros a través de la experiencia compartida de esa alegría. Mantener conversaciones sobre la ley de ecocidio que surgen de esta sensación de conexión no verbal es útil; difunde el mensaje a un mayor número de personas al que yo no habría podido llegar de otro modo. El hecho de ir a pie en lugar de a lomos de Falco también ha ayudado: es mucho menos intimidante acercarse a alguien que está a la altura de tus ojos. 

Ya he tenido conversaciones sobre la ley de ecocidio con 270 personas mientras paseaba. De ellas, sólo 5 habían oído hablar de los términos "ecocidio" o "ley del ecocidio". Cada una de esas personas probablemente volverá con sus amigos y familiares y les hablará de ello. La gran mayoría de las personas con las que hablamos, incluso las que no han oído hablar del término ecocidio, creen que el concepto es bueno, ya sea una pareja joven a la salida de un pub en el centro de Banbury, un granjero del valle de Mallerstang en el Parque Nacional de Yorkshire Dales, el propietario de un parque de caravanas en Lincolnshire o un paseador de perros en Stalybridge. Algunas de las personas con las que nos hemos reunido, sobre todo agricultores, temen cómo se va a aplicar, pero eso no les impide reconocer la necesidad de un cambio.

Hasta ahora hemos visitado dos escuelas primarias en nuestro viaje, y ha sido bueno invitar a niños y profesores a pensar en la conexión entre los valores de su escuela, como la amabilidad, el respeto o el cuidado, y la idea de una ley para proteger el mundo vivo. 

Estamos entrelazados

Desde el principio quise encontrar una forma de entretejer en Camina por la Tierra el cuidado que tantos de nosotros sentimos por el mundo vivo, y llegar con ese mismo cuidado a una isla que es la que más ha sufrido los daños del cambio climático. Esto está tomando forma en un proyecto textil, Interwoven. Ya hay siete tejedores de distintas partes del Reino Unido, como Coventry, Londres, Glasgow y Lancaster, que crean secciones de 35x45 cm de lo que será una pieza final más grande, unidas con lino cultivado e hilado en los Cotswolds. Una vez que la pieza se haya ensamblado en Stroud, se ofrecerá como regalo al embajador de Vanuatu en el Reino Unido, para honrar su posición como la primera nación en proponer una consideración seria de la ley de ecocidio en el escenario internacional en diciembre de 2019.  

Estamos buscando más tejedores de telar que se unan al proyecto, así que si eres tú, o si puedes correr la voz, ponte en contacto aquí: https://walkforearth.co.uk/contact/. También coseremos una pequeña cantidad de hilo teñido con plantas en la pieza final de Interwoven, así que agradeceríamos que se pusieran en contacto con nosotros los tintoreros naturales que quieran participar.

Si te gusta estar al aire libre, a Falco y a mí nos encantaría que te unieras a nosotros organizando tu propia Caminata por la Tierra local como una minifundación para Stop Ecocidio Internacional. No hace falta que vayas en mula hasta Escocia... y los "paseos" pueden ser con ayuda para la movilidad. La Guía de tu Caminata por la Tierra de nuestro sitio web te explica cómo enviar un mensaje a tu diputado o etiquetarlo si publicas tu caminata en las redes sociales. En "Cómo unirse a Camina por la Tierra" encontrarás toda la información que necesitas. Ha sido estupendo ver a algunas personas que no habían oído hablar de la ley de ecocidio organizar su propia Marcha por la Tierra a nivel local. Tu marcha nos ayudará a alcanzar nuestro objetivo de recaudar 10.000 libras para SEI.

Ha sido maravilloso ver las noticias del impacto de Stop Ecocidio a medida que caminábamos. En el mes en que partimos se cumplió el primer aniversario de la innovadora definición jurídica de ecocidio como delito elaborada por el Grupo Internacional de Expertos. Desde entonces ha servido de base para el debate -y en algunos casos para el cambio legislativo- en los gobiernos de 26 países.

En septiembre del año pasado, Walk for Earth obtuvo una mención en el Parlamento escocés, cuando Monica Lennon MSP preguntó qué papel desempeñaría Escocia en el apoyo al progreso de la ley de ecocidio en los escenarios nacional e internacional. Las preguntas de Monica dieron lugar a la brillante noticia de que se había conseguido una reunión entre Stop Ecocidio Internacional y el Ministro del Gabinete de Infraestructuras de Escocia. Y puede que sea la primera vez que se menciona a una mula por su nombre en el Parlamento de cualquier parte del mundo. Se lo dije a Falco, pero no era algo que pudiera comer.

El mes pasado se produjeron dos grandes hitos en el progreso de la legislación sobre ecocidio. El Parlamento Europeo votó a favor de incluir el ecocidio en su nueva "Directiva sobre la protección del medio ambiente a través del derecho penal". A esto le siguió la semana pasada una resolución de la ONU, encabezada por Vanuatu y 133 Estados copatrocinadores, para que la Corte Internacional de Justicia emita una opinión consultiva sobre las obligaciones de los Estados en relación con el cambio climático. La resolución fue adoptada por consenso en la Asamblea General de la ONU, también por primera vez. Es un hito porque exige claridad sobre las obligaciones de los Estados en virtud del derecho internacional para garantizar la protección de los sistemas terrestres y de las generaciones futuras. Y exige la misma claridad sobre las consecuencias jurídicas para los Estados en virtud de estas obligaciones, en relación tanto con otros Estados (especialmente los más vulnerables a los impactos del cambio climático) como con los "pueblos e individuos de las generaciones presentes y futuras" afectados. Este movimiento abrirá el camino para que más gobiernos apoyen la tipificación del ecocidio como delito internacional.

Espero que te unas a nosotros para expresar tu preocupación por el mundo vivo y tu apoyo a la ley contra el ecocidio, organizando tu propia Marcha por la Tierra este verano.

Gracias,

Zoe y Falco.


¿Es usted profesor y quiere que visitemos su escuela o colegio? Tenemos capacidad para algunas visitas más en nuestra ruta de regreso. 

¿Eres responsable de grupo y te gustaría que tu grupo se uniera a nosotros en un tramo corto de nuestra ruta cerca de tu localidad? ¿O podrías organizar una actividad de teñido de plantas para contribuir a la pieza Interwoven? Nos encantaría saber de ti. 

Contacto: https://walkforearth.co.uk/contact/

Cómo afiliarse: https://walkforearth.co.uk/how-to-join-walk-for-earth/

Proyecto textil entretejido: https://walkforearth.co.uk/interwoven/

Recaudación de fondos: https://cafdonate.cafonline.org/19962#!/DonationDetails

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Extracción de oro a cielo abierto en la Amazonia brasileña

Este artículo ha sido escrito por Louise Romain, antropóloga, activista por la justicia climática y los derechos indígenas y productora del podcast "Circle of Voices". Se basa en una entrevista realizada en la COP15 a los defensores indígenas de la tierra Puyr Tembé y João Víctor Pankararu con el apoyo de Amazon Watch.

Esta entrada forma parte de un Blog de invitadxs que pretende ser un espacio dedicado a los numerosos movimientos/campañas de todo el mundo que se enfrentan a la destrucción de los ecosistemas para que compartan sus historias, relatos y perspectivas.

Créditos: Gran Recodo del Río Xingu, Xingu Volta Grande. ©Cícero Pedrosa Neto/Amazônia Real

Este artículo ha sido escrito por Louise Romain, antropóloga, activista por la justicia climática y los derechos indígenas y productora del podcast "Circle of Voices". Se basa en una entrevista realizada en la COP15 a los defensores indígenas de la tierra Puyr Tembé y João Víctor Pankararu con el apoyo de Amazon Watch.


Una amenaza más en una región frágil 

Es sabido que la región amazónica se enfrenta a la presión de amenazas medioambientales, geopolíticas y socioeconómicas interconectadas. Por ejemplo, la deforestación que deja espacio para el pastoreo de ganado aumenta la transformación de la selva tropical hacia una sabana. Ese proceso se acelera aún más por los incendios forestales y las sequías, que se intensifican con el cambio climático. Pero la Amazonia también sufre la codicia de empresas internacionales interesadas en los recursos minerales que yacen bajo la selva. 

Uno de esos casos es el de Belo Sun Mining Corp, una empresa canadiense que actualmente desarrolla el Proyecto Volta Grande (VGP) en el Gran Recodo del río Xingu, situado en el estado de Pará, Brasil. Pretenden explotar la mayor mina de oro a cielo abierto de la historia de Brasil, amenazando el ecosistema, de importancia crítica, así como a las comunidades locales que allí habitan.

João Víctor Pankararu, coordinador juvenil de la Alianza Global de Comunidades Territoriales y comunicador de APOINME, nos recuerda las consecuencias de mayor envergadura de tales proyectos extractivos: 

João Victor Pankararu en la Marcha por la Biodiversidad y los Derechos Humanos, Montreal. Créditos: Kamikia Kisedje/APIB

"Pensar en grandes empresas, como Belo Sun, requiere una sensibilidad para entender que el impacto no sólo se sentirá en el estado de Pará, en Volta Grande, en Xingu. Es un impacto que nos afectará a todos. Debemos empezar a pensar en la cuestión más amplia que plantean estos desarrollos que afectan a Brasil, porque influirán directamente en la emergencia climática que todos estamos sintiendo." 

La cuenca del río Xingu se ha visto debilitada anteriormente por otro proyecto ecocida: la presa de Belo Monte, en Altamira. Este complejo hidroeléctrico es uno de los mayores proyectos de infraestructuras del mundo. Desplazó a 40.000 personas, se enfrentó a varios juicios por violaciones de los derechos humanos y del medio ambiente, y vulneró los derechos de los pueblos indígenas afectados, especialmente el proceso de obtención del consentimiento libre, previo e informado, tal y como establecen instrumentos jurídicos internacionales como el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas (DNUDPI), ambos ratificados por Brasil.

Un desastre en ciernes

Hay muchas razones por las que no debería permitirse el proyecto Volta Grande. Además de causar deforestación y contribuir a las emisiones de gases de efecto invernadero, la actividad minera también plantea riesgos significativos de contaminación del suelo, el aire y el agua. Belo Sun pretende utilizar cianuro en sus operaciones, un componente altamente tóxico. Como la región está formada por rocas porosas, la contaminación subterránea puede desarrollarse a lo largo del tiempo provocando daños sin precedentes, lejos de la vista pero con repercusiones brutales para los ecosistemas y las especies afectadas. La exposición aguda al cianuro es letal, ya que afecta a la ingesta de oxígeno, lo que puede provocar la parada de los sistemas cardiovascular y nervioso central de los organismos vivos.

La empresa canadiense también planea construir un dique de estériles (una fosa tóxica con los residuos de las operaciones mineras) no exento de problemas de seguridad. En su propia evaluación de impacto ambiental, la propia empresa prevé un alto riesgo de rotura de la presa de residuos. En 2015, Brasil sufrió su mayor desastre medioambiental, la catástrofe minera de Mariana. El colapso de la presa de estériles de Fundão trajo consecuencias traumáticas tanto para las personas como para el medio ambiente, generando un reguero de 500 km de millones de toneladas de lodo tóxico desde el estado de Minas Gerais hasta el océano Atlántico.

El Gran Recodo del Xingú ya está sometido a la presión de la megarepresa de Belo Monte, que está contribuyendo al colapso socioambiental del ecosistema, así como a la escasez de agua y alimentos para las comunidades locales. El proyecto Volta Grande supondría una presión adicional en una región considerada prioritaria para la conservación de la biodiversidad por el Ministerio de Medio Ambiente brasileño. 


Una coalición multilateral contra Belo Sun

De izquierda a derecha: Ta'Kaiya Blaney, defensora de la tierra de la Nación Tla'Amin, territorio Coast Salish no cedido, Columbia Británica, Canadá; Dinamam Tuxá, abogado y APIB y Puyr Tembé, Presidenta de FEPIPA y cofundadora de Anmiga, marchando en Montreal durante la COP15. Créditos: Kamikia Kisedje/APIB

Se ha formado una coalición para resistirse al proyecto. La sociedad civil, organizaciones indígenas y redes internacionales están uniendo fuerzas para concienciar sobre este catastrófico proyecto.El pasado diciembre, Amazon Watch publicó un informetitulado "El riesgo de invertir en Belo Sun", en el que se detallan los riesgos de reputación, jurídicos, políticos, sociales y medioambientales asociados al proyecto. Pintan un cuadro claro para los inversores: No inviertas en ecocidio.

Tanto el informe como el Centro de Recursos para Empresas y Derechos Humanos destacan que la empresa minera ha difundido abiertamente información engañosa, incompleta y distorsionada a los inversores, incluso en actos públicos muy mediáticos. Varias investigaciones han demostrado que Belo Sun solicitó la adquisición ilegal de tierras públicas y derechos de uso del suelo desde 2015. Están forzando el desalojo de poblaciones residentes en la zona minera, prohibieron el acceso público y contrataron seguridad armada para amenazar a las comunidades ribereñas y pesqueras.

A partir de hoy, el proceso de concesión de licencias ambientales ha quedado suspendido a raíz de una demanda presentada por el Ministerio Público Federal (Ministério Público Federal). La sentencia demostró que Belo Sun y la agencia indígena de Brasil (FUNAI) no han evaluado los impactos que el proyecto Volta Grande tendría sobre los pueblos Arara y Juruna, y han ignorado sus derechos a la libre determinación y la autonomía (garantizados por la DNUDPI y el Convenio 169 de la OIT) en lo que respecta a la realización de un proceso de consentimiento libre, previo e informado con estos pueblos.

Hasta ahora, Belo Sun ha incumplido las evaluaciones de impacto socioambiental, los procesos de consulta y la normativa sobre tenencia de tierras. Mientras algunas demandas están a la espera de la decisión de un tribunal de primera instancia en relación con las cuestiones mencionadas, los continuos desafíos legales podrían conducir potencialmente a la suspensión y/o anulación del proyecto Volta Grande.

El informe concluye con lo siguiente:
"La realización del proyecto de Belo Sun podría significar la muerte del río Xingu y el ecocidio de una región vital para la vida en la Tierra". 

Soluciones basadas en principios indígenas

Este proyecto extractivo simboliza algunas de las dolencias modernas a las que nos enfrentamos. A continuación se recogen las principales enseñanzas compartidas por Puyr Tembé, Presidente de FEPIPA y cofundador de Anmiga, y João Victor Pankararu, cuando viajaron desde sus territorios tradicionales para asistir a la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Biodiversidad COP15 en Montreal. Sus citas se han traducido, pero sus voces originales pueden escucharse en los clips de sonido (en portugués).

Puyr Tembé en la Marcha por la Biodiversidad y los Derechos Humanos, Montreal. Créditos: Kamikia Kisedje/APIB

"Históricamente, como pueblos indígenas, hemos hablado del cuidado del medio ambiente y del cuidado de la humanidad, de que si cuidas a la humanidad, cuidas al planeta. La sociedad todavía no ha entendido el mensaje de la naturaleza, el mensaje de los pueblos indígenas y de las poblaciones tradicionales. Y no sé en qué momento la sociedad entenderá la llamada. La llamada del gran Padre, la llamada de la Madre Tierra. Entonces nos preguntamos: ¿qué vamos a hacer? Porque históricamente hemos estado hablando de los peligros, mostrando los riesgos. Hoy estamos cambiando un poco este discurso... Entonces ahora estamos pasando por otro mecanismo, el mecanismo de hablar de amor. Hablar de paz".
[escuche aquí]

Puyr habla a menudo de "reflorestamento", la necesidad de reforestar nuestras mentes y corazones para garantizar una Tierra habitable a las generaciones futuras y coexistir juntos más armoniosamente.

"Reforestar la mente es, de hecho, reforestar tu alma, tu corazón y tu mente. Creo que reforestar no es sólo plantar, mejorar el suelo que pisamos, sino que también tenemos que mejorar, tenemos que descolonizar la mente que está contaminada, literalmente. Y con esta mente contaminada que tiene la sociedad, no podrá salvar al mundo de la destrucción.

Y por eso se están produciendo los impactos ambientales. Muchas ciudades en Brasil y fuera de Brasil están sufriendo los impactos de las lluvias, los incendios, las sequías, y estamos trayendo esta reflexión: ¿qué es esto de reforestar las mentes de lo que estamos hablando? ¿Qué queremos para nuestro futuro? Yo estoy aquí ahora, nosotros estamos aquí ahora. ¿Y qué pasa con nuestros hijos y nuestros nietos? Entonces necesitamos reforestar las mentes de la humanidad para que podamos tener un mundo solidario, un mundo fraterno, un mundo de paz, de amor y de cuidado, pero sobre todo un mundo de sustentabilidad, de sustentabilidad con toda la fuerza ancestral y espiritual que tienen los pueblos indígenas y las poblaciones tradicionales, que se combine con el conocimiento científico y técnico." [escuchar aquí]

Créditos: Louise Romain

João amplía este discurso de inclusión y unidad hablando del "bem viver" o "buen vivir": un principio de vida compartido por los pueblos indígenas de Sudamérica, que se extiende por las culturas indígenas de todo el mundo con diferentes nombres.

"Creo que vivimos anhelando esta paz, poder vivir tranquilos, en nuestros bosques, nuestras selvas, nuestro monte, practicar nuestros rituales tranquila y plenamente, sin que nadie nos amenace ni nos perjudique. Creo que esta visión de plenitud, de paz, de dignidad, de que vivamos bien en nuestro lugar es muy importante.

Hemos elaborado este lenguaje de solidaridad, de amor, de sensibilidad, para que la gente empiece a actuar antes de ver las cosas destruidas. Esto no es lo que queremos. Queremos un lugar seguro, un buen lugar, un lugar de buen vivir, para todos nosotros. No sólo para los indígenas. Queremos que la gente abrace esta causa y la asuma también, que entienda que esta causa nos pertenece a todos. La construcción del buen vivir es responsabilidad de todos". [escuchar aquí]

Por último, apela a la responsabilidad de los pueblos para que exijan cuentas a sus dirigentes y tomen conciencia de la conexión entre nuestro consumo en el mundo occidental y la destrucción de las tierras y vidas indígenas:

"También llamamos la atención de los gobiernos, de los países y de la sociedad civil de que su modo de vida, es decir, el sistema capitalista y consumista, ha invertido en la destrucción de Brasil. Muchos países, gobiernos e instituciones financieras han financiado la destrucción que se ha producido en Brasil. El consumo desenfrenado de bienes materiales ha impulsado la destrucción en Brasil. 

Así que cuando sacamos estos informes, llevándolos a la incidencia internacional, para hablar en conferencias, en convenciones, en foros, de lo que hemos estado viviendo allí, es precisamente para despertar a la gente, a los ciudadanos de esos países, de que su país ha sido un fuerte inversor en esta deforestación, en esta explotación.

Es otra estrategia que también hemos utilizado ahora, despertar a los propios pueblos para que paren los pies a los dirigentes de sus naciones, que no pueden seguir haciendo esto. Es necesario repensar el modelo de vida, este sistema capitalista que nos ha movido a todos durante mucho tiempo y que sólo nos está llevando a un fin, a algo sin propósito." [escuchar aquí]

Para apoyar esta campaña, dirígete al sitio web de Amazon Watch, que actualmente cuenta con una petición para 'Fuera Belo Sun del Amazonasy crea conciencia compartiendo este artículo en tus redes sociales con el hashtag #StopEcocide.

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El descarrilamiento de un tren en Ohio produjo el envenenamiento químico de un pueblo

Este blog independiente ha sido escrito por el abogado de derechos humanos Steven Donziger, más conocido por sus batallas legales contra Chevron, en particular Aguinda contra Texaco, Inc. y otros casos en los que representó a más de 30.000 agricultores e indígenas que sufrieron daños medioambientales y problemas de salud causados por las perforaciones petrolíferas en el campo petrolífero de Lago Agrio, en Ecuador.

Esta entrada forma parte de un Blog de invitadxs que pretende ser un espacio dedicado a los numerosos movimientos/campañas de todo el mundo que se enfrentan a la destrucción de los ecosistemas para que compartan sus historias, relatos y perspectivas.

 
 
 

Este post fue escrito por el abogado de derechos humanos, Steven Donziger, más conocido por sus batallas legales contra Chevron, en particular Aguinda v. Texaco, Inc. y otros casos en los que representó a más de 30.000 agricultores e indígenas que sufrieron daños ambientales y problemas de salud causados por las perforaciones petrolíferas en el campo petrolífero de Lago Agrio, en Ecuador.


El desastroso descarrilamiento de un tren que transportaba sustancias químicas altamente tóxicas y cancerígenas en el estado norteamericano de Ohio parece haber producido un envenenamiento masivo de la pequeña localidad de East Palestine. Miles de personas se enfrentan ahora al riesgo de cáncer y muerte prematura debido a un claro caso de prevaricación empresarial. El incidente ilustra una vez más por qué el Ecocidio debe consagrarse como derecho internacional. Yo diría que si el ecocidio hubiera sido ley, este incidente y la calamitosa crisis ecológica y humanitaria que se derivó de él podrían haberse evitado. 

El ecocidio se define como "actos ilícitos o arbitrario cometidos a sabiendas de que existe una probabilidad sustancial de que se produzcan daños graves y generalizados o a largo plazo para el medio ambiente." Las pruebas de este incidente de mala conducta empresarial y "actosarbitrario " de la parte responsable con daños medioambientales a largo plazo son abrumadoras. 

La empresa ferroviaria cuyo tren causó el accidente -Norfolk Southern- tenía un valor de mercado de unos 55.000 millones de dólares y su equipo directivo cobraba sueldos exorbitantes. La empresa gastó recientemente miles de millones de dólares en una recompra de acciones que enriqueció a los accionistas, mientras se negaba a invertir para mejorar los anticuados sistemas de frenado de sus trenes, que datan de hace más de un siglo. La empresa también gastó grandes sumas en presionar tanto al gobierno federal como a varios gobiernos estatales para impedir la aplicación de normativas que habrían modernizado los sistemas de frenado y aumentado la seguridad. 

Norfolk Southern y su director ejecutivo, Alan Shaw, son actores centrales de una industria famosa por explotar a sus trabajadores. El tren que descarriló en Ohio tenía 150 vagones y una longitud de 1,7 millas, pero sólo contaba con dos trabajadores agotados en los controles. La industria llevaba tres años sin subir el sueldo a sus trabajadores. Los márgenes de beneficio del sector en la última década han pasado del 15% al 41% a medida que los trabajadores ferroviarios (y los riesgos de seguridad) llegaban a un punto de ruptura. Algunos de los mayores fondos de cobertura de Estados Unidos -incluido Blackstone- exigían cada vez más eficiencia para aumentar sus beneficios. 

Cuando se produjo el descarrilamiento, Norfolk Southern tomó la equivocada decisión de detonar más de 1 millón de libras de cloruro de vinilo altamente inflamable. Lo hizo sin contar con la opinión de la comunidad ni debatir los riesgos para la salud. En palabras de un ingeniero local, el ferrocarril "bombardeó" la ciudad para abrir antes las vías y seguir obteniendo beneficios. El resultado fue un hongo nuclear gigante de veneno flotando sobre la ciudad y cientos de kilómetros más allá. La bola de fuego produjo otros compuestos químicos, incluido el fosgeno, un compuesto químico tan mortífero que fue prohibido por la Convención de Ginebra tras la Primera Guerra Mundial. 

Miles de peces flotaban muertos en los arroyos locales. Los residentes informaron de dolencias respiratorias. Sin embargo, las "autoridades" locales afirmaban que era seguro vivir allí y beber el agua. Pasamos por este mismo libro de jugadas después de los ataques del 11 de septiembre, y cientos de personas en la zona afectada terminaron muriendo de cáncer. 

El gobierno estadounidense -incluida la Agencia de Protección Medioambiental- no ha tenido suerte. La EPA fue castrada bajo la Administración Trump y sus principales administradores fueron sustituidos por grupos de presión de la industria química. Su máximo responsable bajo la Administración Biden, Michael Regan, recomendó que los residentes de Palestina Oriental regresaran a la ciudad pocos días después del accidente, a pesar de que la agencia no había realizado ninguna prueba de laboratorio independiente del agua. 

Regan todavía parece más centrado en ayudar a Norfolk Southern a gestionar las consecuencias para las relaciones públicas que en su misión de proteger al público de los daños medioambientales. El periodista Chris D'Angelo en un excelente artículo demuestra que las pruebas en las que se basaron las "autoridades" de Ohio y la EPA para declarar el agua "segura" en East Palestine fueron financiadas por la compañía ferroviaria y que las muestras analizadas estaban contaminadas. En mi opinión, se trata de una mala praxis científica y política y un ejemplo de captura corporativa de una función pública crítica de nuestro gobierno. 

En cuanto a la seguridad del agua, Norfolk sólo realizó análisis en cinco puntos de la ciudad de Palestina Este, lo que resulta sospechoso. Debería haber cientos de muestras tomadas diariamente, no sólo en East Palestine, sino en las comunidades circundantes también afectadas por la nube venenosa en forma de hongo. Y los análisis deben ser de todas las sustancias químicas quemadas, incluidos los nuevos compuestos creados por la detonación. Un experto independiente calificó el muestreo de "chapucero" y "amateur". Además, ni la EPA de Ohio ni la EPA nacional han publicado ningún resultado de muestreo de agua de Palestina Este durante varios días, lo que sugiere que no hay un control continuo del agua. 

Todo esto es profundamente inquietante. Hay muchas preguntas difíciles que necesitan respuesta. Pero los hechos hasta ahora sugieren claramente que la empresa ferroviaria tomó una serie de decisiones intencionadas con ánimo de lucro que produjeron este desastre y empeoraron las consecuencias para el público, lo que llevó a una probabilidad sustancial de daños ambientales a largo plazo y probablemente a la muerte. Este es precisamente el tipo de situación en la que la ley de ecocidio podría haber marcado una diferencia concreta. Si el director general se hubiera enfrentado a esta ley, es muy probable que se hubiera mejorado el sistema de frenado y no se hubiera producido el accidente.

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Argentina: ¡basta de terricidio!

Este post ha sido escrito por el 'Movimiento de Mujeres y Diversidades Indígenas por el Buen Vivir' con la colaboración especial de una de sus integrantes, Paula Mercedes Alvarado Mamani, abogada y coordinadora del Proyecto de Ley de Terricidio.

Esta entrada forma parte de un Blog de invitadxs que pretende ser un espacio dedicado a los numerosos movimientos/campañas de todo el mundo que se enfrentan a la destrucción de los ecosistemas para que compartan sus historias, relatos y perspectivas.

Imagen: "Basta de Terricidio" 2021

Este post ha sido escrito por el 'Movimiento de Mujeres y Diversidades Indígenas por el Buen Vivir' (Movimiento de Mujeres y Diversidades Indígenas por el Buen Vivir ) con la colaboración especial de una de sus integrantes, Paula Mercedes Alvarado Mamani, abogada y coordinadora del Proyecto de Ley de Terricidio. Pertenece al Pueblo Indígena Kolla, es miembro de la Comunidad Tres Ombúes de la Matanza y de la Asamblea de Articulación de los Pueblos del Qollasuyu. También es miembro de la comunidad de mujeres indígenas SISA PACHA del medio de comunicación alternativo Las Sisas.


El Movimiento de Mujeres y Diversidades Indígenas por el Buen Vivir define el "TERRICIDO " como la matanza, no sólo de los ecosistemas tangibles y de las personas que los habitan, sino también de todas las fuerzas que regulan la vida en la tierra, lo que llamamos el ecosistema perceptible.

 

Historia del Movimiento de Mujeres y Diversidades Indígenas por el Buen Vivir

 

En 2013, algunas compañeras comenzamos a recorrer el país con la idea de crear lo que hoy es el Movimiento de Mujeres y Diversidades Indígenas por el Buen Vivir. Salimos con la misión de visibilizar lo que intentan invisibilizar: nuestro cuerpo-territorio, nuestras cosmovisiones, nuestras identidades y nuestros derechos como mujeres y diversidades indígenas. Todos estos motores nos llevaron a un recorrido que reunió y generó el apoyo de mujeres de 36 de las 40 naciones preexistentes que cohabitan el territorio argentino. Juntas, nos organizamos en el espacio que denominamos Marcha de Mujeres Indígenas por el Buen Vivir y que, a mediados de 2018, rebautizamos como Movimiento de Mujeres Indígenas por el Buen Vivir, y nuevamente, en mayo de 2022, rebautizado como Movimiento de Mujeres y Diversidades Indígenas por el Buen Vivir.

  • Somos un movimiento creado para amplificar los derechos. Nos reconocemos como un movimiento de lucha en la medida en que reivindicamos territorio y creemos que los movimientos de lucha deben multiplicarse.

  • No aceptamos la tutela ideológica y nos declaramos políticamente sobre la base de nuestra identidad ancestral y nuestras cosmogonías, conocimientos e identidades territoriales. Somos un movimiento de lucha.

  • Pretendemos recuperar la plurinacionalidad histórica que ha sido ignorada y negada por la historia oficial. Luchamos por la autodeterminación de nuestros cuerpos, nuestros territorios y nuestros pueblos.

  • Confiamos en nuestra fuerza como mujeres de la tierra. Nuestra ascendencia nos da poder y sabiduría; nuestro amor por la vida nos llama a la lucha. El momento es hoy y la unidad es inaplazable.

 

Contexto

Es necesario establecer qué se entiende por Tierras y Territorios de los Pueblos y Comunidades Indígenas. Se ha afirmado que:"El territorio indígena NO es la suma de los recursos que contiene susceptibles de apropiación o de relaciones económicas. Su naturaleza se basa en la integración de elementos físicos y espirituales que vinculan un espacio de la naturaleza a un pueblo determinado".

De esta forma, cabe destacar la trascendencia del Territorio en relación con la identidad y la cultura de los Pueblos Originarios. El Territorio es el hábitat, el espacio en el que los Pueblos desarrollan su vida política, social, económica, cultural y espiritual y satisfacen sus más variadas necesidades. El derecho al Territorio es un derecho natural inherente a los Pueblos Indígenas.

Al mismo tiempo, los Pueblos Indígenas no se consideran en modo alguno "propietarios" de las tierras que ocupan. Al contrario, forman parte de la Naturaleza. Rinden culto a la Pacha Mama o Madre Tierra. La Madre Tierra tiene derechos, por lo que es sujeto de derechos y no objeto de apropiación. La relación de los indígenas con el Territorio no es una relación económica, ni de apropiación. Es una relación espiritual, cultural y de identidad.

 ¿Qué es el terricidio?

El terricidio es la destrucción tanto del ECOSISTEMA TANGIBLE como del ECOSISTEMA ESPIRITUAL. Es un término que entrelaza opresiones históricas y presentes:

 

  • TERRICIDIO es también el intento de destruir nuestras espiritualidades, a través de la invasión de nuestras comunidades por iglesias financiadas por esas transnacionales, que aprovechando el empobrecimiento y la imposibilidad de acceder a otros medios, prestan algunos servicios educativos, asistenciales o musicales, e inoculan ideologías reaccionarias, sexistas, verticalistas, discriminatorias y racistas, llevando al alejamiento de la propia historia e identidad. Decimos que el Terricidio también lo es:

  • GENOCIDIO INDÍGENA - el exterminio sistemático de un grupo social, motivado por la raza, la religión, la etnia, la política o la nacionalidad. Se trata de un asesinato en masa que busca eliminar al grupo y que puede incluir incluso medidas para impedir los nacimientos. Nunca ha cesado, porque nunca ha cesado el exterminio sistemático de los pueblos indígenas. Sólo han cambiado los métodos: hoy nos matan con hambre, desnutrición, violencia racista, represión, contaminación del agua, envenenamiento con agrotóxicos y abandono estatal.

  • ECOCIDE significa la destrucción de la naturaleza, que es nuestro hogar: montañas, bosques, cerros, humedales, ríos, lagos, glaciares, montañas. Es todo lo que están haciendo las empresas del agronegocio, mineras y extractivistas en todo el país, y por lo cual, frente a nuestros intentos de detenerlas, somos sometidos a toda la crueldad del aparato represivo del Estado, que actúa como guardián de estas empresas, con su ejército, policía, gendarmería y sistema judicial.

  • El FEMICIDIO no sólo engloba la violencia machista propia de una sociedad patriarcal, sino también la violencia racial institucionalizada, es decir, es una forma de exterminio elaborada, ideada y desarrollada bajo la protección e impunidad del Estado. El daño a la vida de las mujeres es sistematizado, las mujeres indígenas venimos sufriendo el racismo, la violencia colonial, la discriminación y xenofobia, la misoginia, el chineo*, la muerte de nuestros hijos y el empobrecimiento económico por la pérdida de la tierra.

  • CULTURICIDIO es la destrucción de nuestras formas de vida, de la transmisión del conocimiento, de la medicina, de las formas de alimentarnos, de nuestras deidades y creencias y de nuestras manifestaciones artísticas. Desde la conquista hasta ahora, sólo ha habido desprecio, descalificación, burla y humillación de nuestras prácticas, y la destrucción permanente de nuestros lugares sagrados y fuentes de vida.

  • EPISTEMICIDIO -la eliminación, obstrucción, anulación de todas nuestras formas de conocer y comprender el mundo, la vida y sus procesos. El llamado conocimiento científico se reconoce como la única forma de conocimiento, y es la forma en que la Europa colonialista ha decidido interpretar un mundo enorme y rico y que ha impuesto a Abya Yala y a África. Y en todos los sistemas educativos y en la generalidad de la vida, esta forma se impone como la única válida y legítima, dejando nuestros conocimientos en un lugar de superstición, de creencias míticas o mágicas, como formas de desprecio y desconsideración. Reivindicamos la magia, los mitos y todas las formas ancestrales, espirituales y empíricas de entender, interpretar y mejorar la vida.

  • TRANSFEMICIDIO y TRANSVESTICIDIO - el asesinato organizado, continuo y selectivo de nuestro cuerpo-territorio a diario. La violencia del sistema patriarcal es integral. El contexto de violación y eliminación de los cuerpos disidentes, así como de los cuerpos de las mujeres, se construye con sutilezas perversas, desde el segregacionismo solapado hasta la negligencia institucional que asume que ciertos cuerpos son violables y asesinables, y que algunas vidas valen más que otras. Dentro de esta política, proliferan sectores religiosos radicalizados que construyen discursos de odio, lo que llamamos violencia religiosa contra el género. De esta manera, crean las condiciones para los crímenes de femicidio, travesticidio y transfemicidio.

 

Por todo ello, en marzo de 2021 realizamos la caminata "Basta de Terricidio", bajo el lema "Mientras no tengamos justicia, no habrá paz para ellos". Como mujeres indígenas de varios territorios plurinacionales severamente afectados por el Terricidio, caminamos junto a todas aquellas personas que, como nosotras, se sienten indignadas, impotentes, y que no quieren ser meras espectadoras de la tragedia, ni cómplices silenciosas de la destrucción de la vida. Nos proponemos visibilizar, reclamar y exigir: ¡Basta de Terricidio!

Exigimos que el Terricidio sea considerado un crimen contra la naturaleza y la humanidad, que los asesinos del Terricidio sean juzgados y condenados. Hasta ahora, todos los atentados contra la vida de nuestra madre tierra han quedado impunes. La indolencia de los gobiernos alimenta la codicia, la codicia letal del extractivismo.

Es por ello que arribamos a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires el 22 de mayo de 2021, al cumplirse 211 años del primer grito de independencia de la República Argentina. Recordamos que, en esa fecha, el Estado comenzó a constituirse como fuerza de invasión en los territorios indígenas.

Como herederos de aquellas naciones originarias que fueron invadidas, saqueadas, asesinadas y esclavizadas, hacemos un llamado urgente a actuar desde el espíritu de la mapu, pacha, tierra, para combatir el Terricidio. El Estado debe rendir cuentas de lo que ha hecho con nuestros territorios, ¿cómo piensa reparar todo el daño que ha causado?

 

Imagen: 2º Parlamento de Mujeres Indígenas por el Buen Vivir, en las Grutas, Río Negro (julio 2019).

Conclusión

Esta plurinacionalidad que habita los confines de todos los territorios que hoy se llaman Argentina debe unirse en clamor por la vida, construyendo junto al pueblo argentino y los pueblos del mundo una nueva matriz civilizatoria. Las repúblicas coloniales han llevado el Terricidio a su máxima expresión de dolor y muerte.

Habrá quien diga: "Camaradas indígenas, no se dan las condiciones para que salgamos a luchar". A lo que respondemos: "no están dadas las condiciones para vivir, por eso salimos a luchar. Nuestras curanderas, nuestras autoridades espirituales y muchos de nosotros estamos recibiendo verdades, que se nos revelan a través de los sueños, sobre acontecimientos que van a ocurrir.

Como portadores de estas visiones, nos comprometemos a ser guardianes de la vida. No hay excusa; el momento es ahora. No caminaremos solos. El espíritu de la tierra y los espíritus de nuestros antepasados caminarán con nosotros. Estamos decididos a ofrecer nuestra fuerza, nuestra sabiduría, nuestro espíritu y nuestro caminar para poner fin, de una vez por todas, a tanta muerte. Gritamos al mundo: "Mientras no tengamos justicia, no habrá paz para ellos".

 

Nota: El chineo es un crimen colonialista que persiste en varias provincias de Argentina, donde hombres blancos violan en grupo a mujeres de pueblos indígenas, incluidas menores de edad.

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El oleoducto de África oriental: ¿un futuro ecocidio?

Esta entrada de blog ha sido escrita por Omar Elmawi, Coordinador de la campaña Stop EACOP y de la campaña deCOALonize - con el apoyo de Louise Romain, Stop Ecocidio Internacional y Paul Hallows, Global Witness. Escribe sobre la construcción prevista del EACOP, un oleoducto que atraviesa África Oriental, y los impactos medioambientales, humanos y climáticos (tanto locales como globales) de este proyecto ecocida.

Esta entrada forma parte de un Blog de invitadxs que pretende ser un espacio dedicado a los numerosos movimientos/campañas de todo el mundo que se enfrentan a la destrucción de los ecosistemas para que compartan sus historias, relatos y perspectivas.

Esta entrada de blog ha sido escrita por Omar Elmawi, Coordinador de la campaña Stop EACOP y de la campaña deCOALonize - con el apoyo de Louise Romain, Stop Ecocidio Internacional. Escribe sobre la construcción prevista del EACOP, un oleoducto que atraviesa África Oriental, y las repercusiones medioambientales, humanas y climáticas (tanto locales como globales) de este proyecto ecocida.

 

El oleoducto eléctrico más largo del mundo

Uganda cuenta con algunas de las mayores reservas de crudo del continente africano, con unos 1.700 millones de barriles de petróleo recuperable, situados bajo su frontera con la República Democrática del Congo. Extraer y transportar este petróleo significaría causar una destrucción segura de algunos de los hábitats ecológicamente más singulares de África Oriental. 

Esto es exactamente lo que TotalEnergies planea hacer. El gigante de los combustibles fósiles posee uno de los dos principales yacimientos petrolíferos a orillas del lago Alberto, así como una participación mayoritaria en el oleoducto que habría que construir para transportarlo y exportarlo a los mercados internacionales: el Oleoducto de Petróleo Crudo de África Oriental, o EACOP. El oleoducto, de 1.443 km de longitud y con calefacción, transportará petróleo desde los yacimientos de Tilenga y Kingfisher, a orillas del lago Alberto (Uganda), hasta el puerto de Tanga (Tanzania). Además de la empresa francesa, los campos petrolíferos de Uganda (formados por más de 400 pozos petrolíferos) también serían explotados por China National Offshore Oil Corporation Ltd. (CNOP). 

 

Impacto ambiental, humano y climático del EACOP

Una vez construido, el EACOP causará daños irreversibles a la biodiversidad, los hábitats naturales y el agua, además de desplazar a las comunidades locales y amenazar sus medios de vida. También tendrá importantes repercusiones globales al contribuir al calentamiento del planeta.

El oleoducto perturbará casi 2.000 kilómetros cuadrados de hábitats protegidos de fauna salvaje, como el Parque Nacional de las cataratas Murchison, la Reserva Forestal de Taala, el Bosque de Bugoma y la Reserva de Caza de Biharamulo. Estas reservas son fundamentales para la conservación de especies vulnerables como el chimpancé oriental y el elefante africano, ambas incluidas en la "lista roja"de especies amenazadas de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza. También alterará zonas marinas de importancia biológica, como reservas de manglares y arrecifes de coral, a lo largo de la costa tanzana, así como numerosos humedales Ramsar de importancia mundial. 


El EACOP también afectará a las comunidades humanas, planteando importantes riesgos para millones de personas. Aproximadamente un tercio del oleoducto atravesará una de las mayores cuencas lacustres de África, el lago Victoria, del que dependen más de 40 millones de personas para obtener agua y alimentos. Un pequeño vertido o fuga, muy probable ya que el oleoducto atraviesa una zona sísmica que sufre terremotos con regularidad, sería catastrófico. Los vertidos de petróleo pueden propagarse a grandes distancias por ríos y arroyos, así como infiltrarse en los acuíferos y contaminar los recursos hídricos durante décadas o siglos. 

Su impacto climático sería enorme y desastroso para el presupuesto de carbono de la humanidad. Se calcula que el gasoducto y su infraestructura asociada liberarán 33 millones de toneladas de dióxido de carbono al año. Esto pondría en peligro diversos compromisos internacionales, como el Acuerdo de París sobre el Clima, el Convenio sobre la Diversidad Biológica (CDB) y la Convención de Ramsar sobre los Humedales, y entrañaría el riesgo de incumplimiento de varios acuerdos mundiales y regionales, así como de los objetivos de emisiones netas cero fijados por los países implicados. Además de su importante contribución a la crisis climática mundial, el proyecto EACOP también abriría una nueva frontera de desarrollo de alto riesgo en las zonas vecinas.

 

¿Ecocidio futuro?

Lo trágico es que todas estas consecuencias devastadoras, tanto para la población de Uganda y Tanzania como para las especies animales y vegetales que habitan las zonas afectadas, son previsibles. Las amenazas al mundo natural y a las comunidades humanas son bien conocidas. Nadie podrá darse la vuelta una vez finalizada la explotación y escandalizarse por la destrucción irreversible del mundo natural que fue necesaria para empezar a bombear el petróleo.

La destrucción premeditada de la naturaleza, o "ecocidio", es el núcleo de un cuerpo de pensamiento jurídico y político internacional cada vez más prominente, que trata de tipificar como delito a escala internacional los daños masivos al mundo natural vivo. Según un grupo de destacados juristas internacionales especializados en medio ambiente, derechos humanos y derecho penal, el ecocidio se define como "actos ilícitos o arbitrario cometidos a sabiendas de que existe una probabilidad sustancial de que esos actos causen daños graves y generalizados o a largo plazo al medio ambiente".

El plan de TotalEnergies de causar daños premeditados, generalizados y permanentes al medio ambiente en Uganda y Tanzania podría entrar dentro de los criterios del ecocidio. La construcción del oleoducto de África Oriental sería un crimen contra la naturaleza y un desastre para los medios de subsistencia de la población de Uganda y Tanzania. 

 

Contraargumentos y promesas

Los proyectos ecocidas suelen justificarse por sus supuestos beneficios económicos, y el EACOP no es diferente.

TotalEnergies promete empleos e inversiones para la región, estimando que se crearán 11.000 nuevos puestos de trabajo. Sin embargo, casi todos ellos son empleos de construcción a corto plazo necesarios para construir el oleoducto, que se evaporarán una vez terminado. Cuando empiece a fluir el petróleo, sólo quedarán entre 200 y 300 empleos fijos.

La construcción del oleoducto también pondría en peligro fuentes de trabajo mucho más importantes. En Uganda, más de 600.000 personas trabajan en el sector turístico, que depende de la conservación de los hábitats que el oleoducto destruiría. Aunque se ofrecieran más empleos permanentes, sigue siendo profundamente injusto que el trabajo que se ofrece a ugandeses y tanzanos dependa de la destrucción de nuestros espacios naturales.

 

Crece la resistencia: Alianza #StopEACOP

Grupos y comunidades locales han unido fuerzas con más de 260 organizaciones de la sociedad civil africanas e internacionales para formar la campaña #StopEACOP. Mediante la movilización pública, las acciones legales, la investigación, el activismo de los accionistas y la defensa mediática, están ejerciendo presión para detener el proyecto.

Dado que TotalEnergies y China National Offshore Oil Corporation Ltd. buscan un préstamo de 2.500 millones de dólares para poner en marcha el proyecto, Stop EACOP ha elaborado una lista de los principales financiadores recientes (bancos y aseguradoras) a los que probablemente se pedirá que se sumen al préstamo. La semana pasada, cinco grandes bancos (Deutsche Bank, Citi, JPMorgan Chase, Wells Fargo y Morgan Stanley), una aseguradora y una agencia de crédito a la exportación confirmaron que no se sumarán al préstamo para financiar el proyecto EACOP. Se unen así a la creciente lista de bancos (20) y aseguradoras (8) que no quieren financiar ni asociarse al EACOP.

Este proyecto extractivo está destinado a desencadenar una gran serie de problemas medioambientales, sociales y de derechos humanos. TotalEnergies tiene la responsabilidad moral de cancelar el proyecto, y los gobiernos de todo el mundo deben empezar a perseguir estos delitos medioambientales por lo que son: ecocidio.

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Robin Gairdner Robin Gairdner

ReconAfrica: ecocidio en la cuenca del Kavango

Este blog ha sido escrito por Esther Stanford-Xosei, coordinadora de la Campaña Stop the Maangamizi: We Charge Genocide/Ecocide Campaign y cofundadora de la Red de Solidaridad Internacionalista Extinction Rebellion. Louise Romain, responsable internacional de la campaña Stop Ecocide, ha recopilado enlaces y recursos adicionales para la campaña.

Esta entrada forma parte de un Blog de invitadxs que pretende ser un espacio dedicado a los numerosos movimientos/campañas de todo el mundo que se enfrentan a la destrucción de los ecosistemas para que compartan sus historias, relatos y perspectivas.

 
 
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Este blog en profundidad ha sido escrito por Esther Stanford-Xosei, coordinadora de la Campaña Stop the Maangamizi: We Charge Genocide/Ecocide Campaign y cofundadora de la Red de Solidaridad Internacionalista Extinction Rebellion. Louise Romain, responsable internacional de la campaña Stop Ecocide, ha recopilado más enlaces y recursos para la campaña.

Escribe sobre las repercusiones ecocidas y genocidas de las actividades de exploración de la empresa canadiense de petróleo y gas ReconAfrica para las comunidades indígenas y locales. Sugiere cómo una justicia reparadora panafricana puede ofrecer soluciones a las comunidades afectadas.

 
Créditos de las imágenes: John Grobler

Créditos de las imágenes: John Grobler


Un desastre ecológico y una bomba de carbono

ReconAfrica es una empresa canadiense de petróleo y gas dedicada a la exploración y explotación de combustibles fósiles en la cuenca del Kavango, que se extiende por el noreste de Namibia y el noroeste de Botsuana. La empresa posee una licencia de exploración de petróleo y gas que le da derecho a obtener una licencia de producción de 25 años, así como a explotar potencialmente unos 120.000 millones de barriles de petróleo en una zona de ecosistema único y virgen, mayor que Bélgica. Esta zona abarca 9.800 millas cuadradas de Namibia, además de una zona adyacente en la vecina Botsuana de 13.250 millas cuadradas. Preocupantemente, ReconAfrica posee una participación del 100% en la licencia petrolífera del noroeste de Botsuana y del 90% en la licencia que opera en Namibia. La zona de la licencia consta de seis reservas de fauna gestionadas localmente, o zonas de conservación, y alberga varias especies de grandes mamíferos en peligro de extinción, como perros salvajes afrikanos, leones, guepardos, rinocerontes blancos y negros, buitres de lomo blanco, pangolines terrestres, la mayor manada de elefantes de sabana que queda en África, así como 400 especies de aves.


Namibia está reconocido como uno de los países más vulnerables a los efectos del cambio climático, por lo que resulta increíble que el Gobierno namibio se marque un gol en propia meta colaborando con ReconAfrica en el incumplimiento de sus responsabilidades globales de contribuir a reducir las emisiones de carbono a 1,5 °C como parte del Acuerdo de París sobre el Cambio Climático. Las previsiones de producción de petróleo de ReconAfrica, de 120.000 millones de barriles, tendrán consecuencias devastadoras para la humanidad: la huella de carbono de este nuevo yacimiento podría equivaler a una sexta parte del presupuesto máximo de carbono potencial de la humanidad*.


Abundan las pruebas de los impactos históricamente documentados de la exploración de petróleo y gas en ecosistemas sensibles desde el punto de vista medioambiental. En Botsuana y Namibia, donde la minería, el turismo y ahora la producción de petróleo y gas son las principales fuentes de generación de ingresos, se preservan los intereses geopolíticos estratégicos de los gobiernos euroamericanos y sus empresas dedicadas a industrias extractivas perjudiciales para el medio ambiente y genocidas; la mayoría de estas materias primas se extraen y exportan en beneficio de los mercados extranjeros, sin tener en cuenta el daño que causan a las personas y al planeta. Sin embargo, en lugar de reconocer la deuda ecológica que se tiene con los Pueblos Indígenas de Namibia y Botsuana, y el correspondiente deber de apoyar a dichos gobiernos y a sus pueblos en la transición hacia fuentes de energía renovable, ReconAfrica está llevando a cabo actos de destrucción del ecosistema de los que dependen los Pueblos Indígenas y otras comunidades locales que equivalen a genocidio y ecocidio. El ecocidio es un posible método de genocidio si fragmenta o destruye relaciones socioecológicas y culturales vitales entre los seres humanos y la naturaleza. Nosotros, en la Campaña Stop the Maangamizi; We Charge Genocide/Ecocide (SMWeCGEC), nos referimos a esto como la continuación del daño 'Maangamizi' (Holocausto Afrikan ) de esclavitud y colonialismo infligido a todos los pueblos Afrikan en todo el mundo.

 

Violación de los derechos de las comunidades locales

Créditos de las imágenes: Namibia Media Holdings

Créditos de las imágenes: Namibia Media Holdings

Las regiones de Kavango Oriental y Kavango Occidental albergan a unas 200.000 personas, entre ellas las comunidades kavango y san, reconocidas como indígenas del delta del Okavango, cuyos derechos al consentimiento libre, previo e informado, según la Declaración de la ONU sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas, están siendo violados. ReconAfrica está violando esos derechos, al entrar en Namibia y Botsuana sin el consentimiento de las comunidades indígenas. Hace tiempo que fueron desposeídas de su poder y se ven desproporcionadamente afectadas por la desigualdad en la distribución, la "propiedad" y el acceso a la tierra, como herencia del colonialismo directo del pasado, pero también del neocolonialismo actual. Con la afluencia de operadores turísticos al delta, pueblos indígenas como los san, los anikhwe, los bugakhwe y otras comunidades locales fueron expulsados de sus territorios tradicionales para dar paso a zonas de gestión de la fauna salvaje o a concesiones.

Mujer del pueblo San, Kawe, Namibia.  Créditos de las imágenes: Ina Maria Shikongo

Mujer del pueblo San, Kawe, Namibia.
Créditos de las imágenes: Ina Maria Shikongo


Además, el Kavango es la región más empobrecida de Namibia, con una tasa de desempleo de casi el 50% en Kavango Este. El empobrecimiento afrikán perdura en la región, a pesar de todos los beneficios que se suponía iba a reportar la designación del delta del Okavango como Patrimonio de la Humanidad. En cambio, se ha convertido en un patio de recreo de turistas de élite de EE.UU. y Europa que pagan precios desorbitados por safaris y alojamientos turísticos de alto coste.

 

Justicia reparadora panafricana

La SMWeCGEC(Stop the Maangamizi; We Charge Genocide/Ecocide Campaign) es una campaña de prevención del genocidio y del ecocidio, de reparación y de justicia reparadora que aboga por las Reparaciones Pan-Afrikas para la Justicia Global y la Reparación del Planeta, es decir, la necesidad de reparar holísticamente nuestra relación con, y nuestra inseparabilidad de, la tierra, el medio ambiente y el pluriverso. Más allá de las meras descripciones de los daños causados por ReconAfrica, SMEWeCGEC, en colaboración con la Red de Solidaridad Internacionalista de la Rebelión de la Extinción (XRISN), se ofrece a ayudar a las comunidades indígenas afrikas de la región a fortalecer, mediante la construcción de un movimiento unificador de justicia reparadora panafrikana y la glocalización de la solidaridad internacionalista, su propia resistencia colectiva a la invasión corporativa transnacional extranjera de ReconAfrica en su territorio nativo.


Tenemos que reconocer la importancia global de su lucha para detener las exploraciones petrolíferas y la posibilidad de fracturación hidráulica en Kavango Este y Oeste, así como en la vecina Botsuana. Esto puede hacerse cultivando formas innovadoras de denunciar y pedir cuentas a ReconAfrica en el "tribunal de la opinión pública" más allá de las fronteras de Namibia, Botsuana y, de hecho, de toda África.

Créditos de las imágenes: Namibia Media Holdings

Créditos de las imágenes: Namibia Media Holdings

Una de esas vías es que las comunidades afectadas del delta del Okavango desarrollen Asambleas Populares como forma alternativa de autogobierno democrático participativo y de toma de decisiones sobre el uso de la tierra y los recursos, necesaria para reparar el déficit democrático inherente a la maquinaria estatal colonial que permanece intacta. A pesar de librar la lucha por la liberación, quienes se hicieron cargo de la maquinaria del Estado-nación colonial en Namibia en fecha tan reciente como 1990, y en Botsuana en 1966, han carecido de poder para: (1) revertir las consecuencias de la infame Conferencia de Berlín de 1884-1885, que dividió África y trazó arbitrariamente las fronteras que siguen existiendo hoy en día; (2) detener los daños del neocolonialismo que refuerza el consenso de la Conferencia de Berlín, por el que grandes partes de África se consideraron "terra nullius" y, por tanto, sirvieron de legitimación para que las potencias imperiales y sus empresas extrajeran riquezas minerales y recursos energéticos para comercializarlos en el extranjero en lugar de beneficiar a los afrikanos; y (3) reparar eficazmente las violaciones estructurales inherentes a los "bantustanes" estatales heredados tras la supuesta independencia.


Las Asambleas de los Pueblos pueden establecer bancos locales del Tribunal Internacional de los Pueblos Ubuntukgotla para la Justicia Global; un tribunal afrikán de interconexión de la humanidad de los pueblos que desarrolla e implementa el "derecho internacional desde abajo" para llevar a ReconAfrica a juicio por crímenes de ecocidio y genocidio, también liderado por el SMWeCGEC. Estos procesos conjuntos de las Asambleas de los Pueblos y los bancos locales, nacionales e internacionales del Ubuntukgotlas nos permitirán, en el SMWeCGEC y la XRISN, apoyar mejor a las comunidades del Delta del Okavango para, no sólo dar a conocer su causa, sino también atraer la solidaridad internacionalista de otras diversas comunidades de resistencia y otras fuerzas progresistas de todo el mundo.


Esther Stanford-Xosei, coordinadora de la Campaña Stop the Maangamizi: We Charge Genocide/Ecocide Campaign y cofundadora de la Red de Solidaridad Internacionalista Extinction Rebellion.

 

Crece el movimiento de solidaridad para salvar el delta del Okavango

En todo el mundo, diversas iniciativas de la sociedad civil e instituciones mundiales han expresado su preocupación por las actividades de ReconAfrica, que amenazan de ecocidio al delta del Okavango y la región circundante.
 

En junio, 185 organizaciones comunitarias y no gubernamentales de todo el mundo instaron a las autoridades canadienses a investigar y tomar medidas en relación con los planes de explotación masiva de petróleo y gas de la empresa canadiense ReconAfrica.

Créditos de las imágenes: Nick Clarke

Créditos de las imágenes: Nick Clarke

Su carta abierta se publicó antes de la Junta General Anual de la empresa y en ella se detallan las amenazas que el posible desarrollo de ReconAfrica supone para los derechos humanos, los derechos de los indígenas, los medios de subsistencia locales, el agua potable para más de un millón de personas, el clima mundial y un ecosistema crítico y famoso en todo el mundo. Más información.


El 4 de junio se celebró una jornada mundial de acción en varios países, como Alemania, Inglaterra, Canadá, Sudáfrica, Namibia y Botsuana. En kit de herramientas de amplificación y acción fue elaborado por Fridays for Future Digital, Climate Strike Canada y Kavango Alive.

 

En julio, el Comité del Patrimonio Mundial expresó "su preocupación por la concesión de licencias de prospección petrolífera en zonas ecológicamente sensibles de la cuenca del río Okavango (...) que podrían tener repercusiones negativas en los bienes de la UNESCO en caso de vertidos o contaminación" . Lea el informe de la Convención sobre la protección del Patrimonio Mundial Cultural y Natural, (p. 214-217). 

Créditos de las imágenes: Nic Eliades

Créditos de las imágenes: Nic Eliades


En septiembre, el Center for International Environmental Law (CIEL), Global Law Alliance y otros grupos de la sociedad civil presentaron una solicitud a la TSX Venture Exchange (TSX-V) para que investigara posibles tergiversaciones en las divulgaciones y comunicaciones públicas de Recon, así como la interferencia entre la representación del proyecto ante las partes interesadas locales y ante los inversores. Más información.


Más recientemente, la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) aprobó una moción favorable (moción 136) para proteger el Okavango de la explotación de petróleo y gas. Aunque no es jurídicamente vinculante, todas las mociones aprobadas se convierten en Resoluciones y Recomendaciones y, por tanto, en el cuerpo de la política general de la UICN. Los activistas trabajan ahora para que los gobiernos de Namibia y Botsuana apliquen la moción.

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¿Ecocidio debido a la quema de biomasa?

Esta entrada de blog ha sido escrita por Johan Vollenbroek, asesor principal de Mobilisation for the Environment, y Maarten Visschers, miembro del Consejo de Leefmilieu. Escriben sobre los efectos destructivos de la tala de bosques, como en Estados Unidos y la región del Báltico, y la necesidad de abordar la actual legislación de la UE que considera la quema de madera (biomasa) como una forma de energía sostenible.

 

Para los Países Bajos, haga clic aquí

Esta entrada forma parte de un Blog de invitadxs que pretende ser un espacio dedicado a los numerosos movimientos/campañas de todo el mundo que se enfrentan a la destrucción de los ecosistemas para que compartan sus historias, relatos y perspectivas.

 
 
 

Esta entrada del blog ha sido escrita por Johan Vollenbroek, Presidente de Mobilisation for the Environment, y Maarten Visschers, miembro del Consejo de Leefmilieu. Hablan de los efectos destructivos de la tala de bosques en Estados Unidos y la región del Báltico, y de la necesidad de abordar la actual legislación de la UE que considera la quema de madera (biomasa) como una forma de energía sostenible.


Ecocidio de los bosques como consecuencia directa de la quema de biomasa.


Entre 2012 y 2020, la quema de pellets de madera como recurso energético en Europa se ha duplicado, pasando de 15 a 30 millones de toneladas al año. El método utilizado para obtener madera para pellets es la tala industrial de bosques. En realidad, los bosques naturales también se talan y se transforman en monocultivos de árboles. En los últimos 60 años, el 20% de los bosques naturales del sureste de EEUU se han transformado en plantaciones: un desastre para la biodiversidad. En los países bálticos y en Suecia se produce la misma catástrofe ecológica: Ecocidio debido a la quema de biomasa. 

Las emisiones de CO2 de la combustión de madera son mayores que las del carbón

La legislación climática europea sigue considerando la quema de madera (también llamada quema de biomasa) una forma de energía sostenible. Los científicos del Consejo Asesor Científico de las Academias Europeas(EASAC) afirman que nada más lejos de la realidad. La emisión de CO2 de la quema de árboles es un 15% superior a la de la quema de carbón y dos veces superior a la del gas. Los árboles plantados tardan entre 5 y 10 décadas en recuperar la misma cantidad de CO2 emitida durante el proceso de combustión. Esta emisión adicional de CO2 agrava la crisis climática en la que nos encontramos. En la próxima década, las emisiones de CO2 deben reducirse al menos un 50% (en comparación con 1990) para cumplir los objetivos del Acuerdo de París sobre el clima. Un mejor mantenimiento de los bosques existentes, bosques más variados y la plantación de nuevos bosques biodiversos son las mejores soluciones climáticas y las mejores soluciones para detener la pérdida de biodiversidad. En 2018, así lo destacaron 800 científicos en una carta dirigida a la Comisión Europea. A principios de 2021, más de 500 científicos y economistas pidieron en una carta al presidente estadounidense Biden, a la presidenta de la Comisión Europea Von der Leyen, al presidente del Consejo Europeo Charles Michel, al primer ministro japonés Suga y al presidente surcoreano Moon que dejaran de definir la quema de biomasa como neutra en carbono en la Directiva europea sobre energías renovables.

 
Créditos de las imágenes: Daniel Djamo

Créditos de las imágenes: Daniel Djamo

 

La tala industrial es desastrosa para la biodiversidad

Sin embargo, el uso de pellets de madera como biomasa sigue aumentando. La recogida de madera para la fabricación de productos de madera, fibra de papel y pellets de madera se realiza mediante talas industriales. Continuamente se destruyen hectáreas de bosque. Esto contrasta con la solución mucho mejor de la tala selectiva, en la que sólo se cortan unos pocos árboles por hectárea. La tala industrial es rentable para las empresas forestales. Se pueden talar hectáreas de bosque, una tras otra, para producir pellets. Sin embargo, los efectos sobre el suelo y la biodiversidad son catastróficos. El número de especies de aves en los bosques cae en picado y se libera el carbono almacenado en el suelo. Esto es un ecocidio.  

Créditos de las imágenes: Tala de árboles en el sureste de EE.UU. (Dogwood Alliance)

Créditos de las imágenes: Tala de árboles en el sureste de EE.UU. (Dogwood Alliance)

Sureste de Estados Unidos

En el sureste de Estados Unidos se han talado 16 millones de hectáreas de bosque en el periodo comprendido entre 1950 y 2010. Se trata de una extensión cuatro veces mayor que la de los Países Bajos. Esto significa que el 20% de todos los bosques naturales de esta región han sido talados. Los bosques han sido sustituidos por plantaciones monótonas de árboles y la biodiversidad ha desaparecido por completo en estas zonas.

Sin embargo, la tala rasa sigue siendo el método utilizado para recoger madera en estos humedales forestales protegidos, con el fin de producir pellets de madera. El productor estadounidense de pellets de madera Enviva es el mayor proveedor mundial de pellets de madera. Enviva es propietaria de nueve grandes fábricas de pellets de madera en el sureste de EE.UU. y está en plena expansión. En 2019, se exportaron más de 15 millones de toneladas de pellets de madera de EE. UU. a Europa.

 
Figura 1: Conversión de bosques naturales en plantaciones de árboles entre 1950 y 2010 (fuente: Dogwood Alliance, Stand4Forests Reports Series, 2020)

Figura 1: Conversión de bosques naturales en plantaciones de árboles entre 1950 y 2010 (fuente: Dogwood Alliance, Stand4Forests Reports Series, 2020)

 
 
Figura 2: Producción de pellets de madera en el sureste de EE.UU. para la quema de biomasa con fines energéticos sostenibles en Europa (fuente: Dogwood Alliance).

Figura 2: Producción de pellets de madera en el sureste de EE.UU. para la quema de biomasa con fines energéticos sostenibles en Europa (fuente: Dogwood Alliance).

 

Países bálticos

En los países bálticos también se utiliza la tala masiva como método de recolección para la producción de pellets de madera. Un reciente informe de la organización ecologista Fondo Estonio para la Naturaleza (ELF) describe las desastrosas consecuencias ecológicas de la extracción de madera en los bosques de Estonia. La ardilla voladora, el urogallo, la cigüeña negra y cientos de musgos, hongos y líquenes son especies amenazadas de extinción. En 20 años se ha perdido el 25% de las aves forestales.

Créditos de las imágenes: Tala rasa en Estonia (Fondo Estonio para la Naturaleza)

Créditos de las imágenes: Tala rasa en Estonia (Fondo Estonio para la Naturaleza)

La retirada de madera muerta de los bosques para la quema de biomasa es fatal para insectos e invertebrados. Los árboles muertos y dañados suelen formar un microclima nutritivo y hacen que una nueva generación de árboles crezca en esos lugares. Estos microhábitats están habitados por miles de invertebrados que forman parte esencial de la cadena alimentaria, suministrando alimento a otros invertebrados, anfibios, reptiles, aves y mamíferos.

 

Eliminación de la quema de biomasa como fuente de energía sostenible en la Directiva europea sobre energías renovables (REDII)

La Comisión Europea está evaluando la Directiva sobre energías renovables (REDII) y publicará una versión mejorada a finales de junio. El Parlamento Europeo tomará una decisión en septiembre. Las organizaciones de defensa de la naturaleza insisten en que la quema de biomasa no debe incluirse como fuente de energía sostenible. Piden a la Comisión Europea y al Parlamento Europeo que eliminen de la Directiva la quema de biomasa como energía sostenible.

 

 

Este gastblog forma parte de una serie que sirve de punto de partida a los grandes movimientos/campamentos mundiales para descubrir los ecosistemas, sus historias y sus perspectivas.

 
 

El siguiente artículo ha sido escrito por Johan Vollenbroek, portavoz de Mobilisation for the Environment, y Maarten Visschers, redactor jefe de Leefmilieu. El blog trata sobre el impacto destructivo de la deforestación industrial sobre la biomasa, entre otras cosas, en el Sudoeste de los Estados Unidos y en los Estados bálticos. De noodzaak tot aanpassing van de huidige EU-regelgeving wordt benadrukt. In deze regelgeving wordt biomassaverbranding ten onrechte aangeduid als duurzame energiebron.


Ecocide van bossen als gevolg van biomassaverbranding

En el periodo 2012-2020, el volumen de suministro de biocarburantes para la producción de energía en Europa pasará de 15 a 30 millones de toneladas al año. De winning van hout voor houtpellets vindt plaats door industriële kaalkap van bossen. Sin embargo, en la práctica, también se han utilizado y mezclado en las fábricas de hule. Además, los moerasbossen en el centro de la VS se utilizan para fabricar casetas. In de laatste 60 jaar is 20% van het natuurlijk bos in het zuid-oosten van de VS omgezet in plantages. Desastre para la biodiversidad. In de Baltische Staten en Zweden speelt eenzelfde ecologisch drama zich af. Ecocide als gevolg van biomassaverbranding.

CO2 uitstoot houtstook hoger dan steenkolen

El cambio climático europeo no es sólo una forma de energía renovable. Así lo afirman los científicos del Consejo Asesor Científico de las AcademiasEuropeas (EASAC). El contenido de CO2 de los combustibles fósiles es un 15% mayor que el de la gasolina y dos veces mayor que el del gas. Se tardará entre 50 y 100 años en eliminar el CO2 de los combustibles alternativos. Este aumento adicional de las emisiones de CO2 no puede ser aprovechado por el clima. En los próximos 10 años, la emisión de CO2 deberá reducirse en un 50% (en comparación con 1990) para reducir los efectos del Acuerdo de París. Las mejores medidas para combatir el cambio climático son la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero, el aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero y la plantación de especies vegetales. Ook om het verlies aan biodiversiteit een halt toe te roepen. En 2018, 800 científicos lo expusieron en un informe a la Comisión Europea. A principios de 2021, más de 500 expertos y economistas se reunirán con el Presidente Biden (VS), la Vicepresidenta de la Comisión Europea Von der Leyen, el Presidente del Consejo Europeo Charles Michel, el Primer Ministro Suga (Japón) y el Presidente Moon (Corea del Sur) para hablar de la neutralidad climática de la energía renovable en la Unión Europea.

 
Créditos: Daniel Djamo

Créditos: Daniel Djamo

 

El cambio climático industrial, un desastre para la biodiversidad

Kaalkap in het zuidoosten van de VS (foto Dogwood Alliance)

Kaalkap in het zuidoosten van de VS (foto Dogwood Alliance)

Además de la fabricación de papel, el uso de balasto para el marcaje de biomasa es cada vez más frecuente. La obtención de madera para la fabricación de productos de madera, papel y granulados de madera se basa en un sistema de corte industrial. Por otra parte, se han utilizado grandes cantidades de madera. Esto, a su vez, se traduce en una producción selectiva de menos de diez toneladas por hectárea. Industriële kaalkap is voor bosbouwbedrijven financieel rendabel. Hectares bos kunnen achter elkaar worden gekapt voor houtpelletproductie. De effecten op de bodem en biodiversiteit zijn echter desastreus. Zo daalt het aantal bosvogels drastisch. La ingesta de alcohol en el cuerpo puede ser perjudicial para la salud. Es una forma de ecocidio.

Het Zuidoosten van de Verenigde Staten

En el periodo 1950-2010 se han talado 16 millones de hectáreas de bosques naturales en la cuenca mediterránea de los Estados Unidos. Se trata de un área que representa casi la mitad de la superficie total de los Países Bajos y que representa más del 20% de los bosques naturales de los Estados Unidos. En las llanuras hay plantaciones monótonas ("houtakkers"). De gehele biodiversiteit in deze gebieden is verdwenen.

No siempre es fácil encontrar un hueco en el mercado de los productos de gran consumo de VS. Enviva, el fabricante estadounidense de productos textiles, es el mayor proveedor del mundo. Enviva es propietaria de una gran cantidad de productos de polietileno en el centro de VS y cuenta con un gran número de ellos. En 2019, se exportarán a Europa más de 15 millones de toneladas de camiones de la VS.

Figura 1. Asignación de bosques naturales a plantaciones en el periodo 1950-2010 en la región de VS (bron: Dogwood Alliance, Stand4Forests Reports Series, 2020)

Figura 1. Asignación de bosques naturales a plantaciones en el periodo 1950-2010 en la región de VS (bron: Dogwood Alliance, Stand4Forests Reports Series, 2020)

Figuur 2. Productie houtpellets in Zuidoost- VS ten behoeve van biomassaverbranding voor 'duurzame energie' in Europa (bron: Dogwood Alliance).

Figuur 2. Productie houtpellets in Zuidoost- VS ten behoeve van biomassaverbranding voor 'duurzame energie' in Europa (bron: Dogwood Alliance).

Estados bálticos

También en los Estados bálticos se ha producido un importante aumento de la producción de pellets en el exterior a través del kaalkap. Un reciente informe del Fondo Estonio para la Naturaleza (ELF) describe los desastrosos efectos ecológicos de la ganadería ilegal en Estonia. Se han detectado en su área de influencia ekhoorn, auerhoen, zwarte ooievaar and honderden mossen, schimmels and korstmos soorten.

Kaalkap en Estland (foto: Fondo Estonio para la Naturaleza)

Kaalkap en Estland (foto: Fondo Estonio para la Naturaleza)

Ook het verwijderen van dood hout (resthout) uit bossen voor biomassaverbranding is desastreus voor insecten en overige ongewervelde dieren in het bos. Las plantas muertas y dañadas forman un microclima que favorece el crecimiento de una nueva generación de plantas en distintos lugares. Estos microhábitats se han creado a partir de dos tipos de suelos de origen vegetal. Estos animales autóctonos constituyen una importante fuente de alimento para otros animales autóctonos, animales domésticos, reptiles, perros y gatos.

 

La marca Biomassaverbranding se une a la red europea Hernieuwbare Energie 

La Comisión Europea evalúa en este momento la Red de Energía Renovable (REDII) y publica a finales de junio una versión revisada. El Parlamento Europeo se pronunciará en septiembre sobre esta versión revisada. Las organizaciones no gubernamentales están de acuerdo en que la biomasa no debe pasar más desapercibida en Europa como energía renovable. Zij roepen de Europese Commissie en het Europees Parlement op om biomassaverbranding te verwijderen als bron van duurzame energie in de Richtlijn.

 

 

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¿Ecocidio en el Mar Menor?

Esta entrada del blog ha sido escrita por el abogado y consultor medioambiental Eduardo Salazar Ortuño. Escribe sobre el Mar Menor, cerca de Murcia, en el sureste de España, la mayor laguna costera hipersalina de Europa. Se cree que este ecosistema único es un foco de creciente ecocidio, debido sobre todo a los residuos mineros y los productos agroquímicos.

Esta entrada forma parte de un Blog de invitadxs que pretende ser un espacio dedicado a los numerosos movimientos/campañas de todo el mundo que se enfrentan a la destrucción de los ecosistemas para que compartan sus historias, relatos y perspectivas.

 
 
 

Esta entrada de blog ha sido escrita por el abogado y consultor medioambiental Eduardo Salazar Ortuño. Escribe sobre el Mar Menor, cerca de Murcia, en el sureste de España, la mayor laguna costera hipersalina de Europa.. Se cree que este ecosistema único es un lugar de creciente ecocidio, debido principalmente a residuos mineros y agroquímicos.


Créditos de las imágenes: Agencia EFE

Créditos de las imágenes: Agencia EFE

El Mar Menor, situado en la Región de Murcia, es la mayor laguna costera hipersalina de Europa. Tiene una superficie de 135 km2 y una profundidad máxima de 7 m. Está conectada con el mar Mediterráneo a través de tres canales o barrancos. Debido a estas peculiaridades ambientales, existe una gran riqueza ecológica, representada por avifauna y especies marinas emblemáticas y/o amenazadas.

Todo ello justifica que se le hayan otorgado diversas figuras de protección nacional, europea o internacional como humedal protegido por el Convenio Ramsar, Zona de Especial Interés para el Mediterráneo según el Convenio de Barcelona, Zona de Especial Conservación de la Red Natura 2000 y espacio natural parcialmente protegido como Parque Regional y Paisaje Protegido, según la normativa regional de la Región de Murcia.

Créditos de las imágenes: Dani Zaragoza

Créditos de las imágenes: Dani Zaragoza

Efectos perjudiciales de la actividad industrial

Créditos de las imágenes: Marcial Guillén (Agencia EFE

Créditos de las imágenes: Marcial Guillén (Agencia EFE

Sin embargo, a pesar de estas cifras y de sus valores naturales, culturales, paisajísticos, históricos y económicos, el Mar Menor se encuentra en grave peligro debido a los impactos causados por el ser humano en las últimas décadas, como los residuos mineros con presencia de metales pesados que llegan a la laguna con el aporte de agua de lluvia; el dragado y ensanchamiento del canal del Estacio en los años 70, que produjo cambios físico-químicos con un importante descenso de la salinidad y la temperatura; el caótico desarrollo urbanístico en sus orillas; y sobre todo por los nutrientes contenidos en los agroquímicos utilizados en la agricultura intensiva e industrial que se desarrolla en su entorno y que son vertidos directamente o al nivel freático.  

Todas estas agresiones, toleradas por las Administraciones cuyos propósitos eran velar por el uso racional de los recursos naturales, han llevado al Mar Menor a tal estado de deterioro y eutrofización, que en 2016 y 2017 se produjo una explosión de fitoplancton con el consiguiente oscurecimiento de las aguas, lo que impidió que las plantas marinas pudieran realizar la fotosíntesis, provocando la desaparición del 85% de sus praderas.

En octubre de 2019, como consecuencia de la contaminación de sus aguas y de las fuertes lluvias torrenciales, se produjo un episodio de anoxia que provocó la muerte de tres toneladas de peces y crustáceos.

Créditos de las imágenes: ANSE, Ecologistas en Acción

Créditos de las imágenes: ANSE, Ecologistas en Acción

Investigación local y criminalización del ecocidio

Desde 2017, a raíz de una investigación previa de la Fiscalía en la que colaboró activamente el Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil, un Juzgado de Instrucción de Murcia ha analizado los comportamientos de decenas de empresarios agrícolas del Campo de Cartagena -vertiente conquense al Mar Menor y al acuífero adyacente-, así como de algunas autoridades estatales de las administraciones estatal y autonómica.

Mientras se desarrolla esta instrucción judicial, centrada en la contaminación específica por nitratos de determinados actores y la tolerancia de determinadas autoridades de la Confederación Hidrográfica del Segura, se alzan voces críticas con la actual configuración de los delitos ecológicos en el Código Penal, para dar cobertura a situaciones de degradación tan extrema y masiva de un ecosistema. Fruto de esta crítica a la que conducen las limitaciones de los actuales delitos ecológicos por su dimensión, penas, prescripción de conductas y dependencia de la normativa administrativa, surge la idea de considerar el "delito de ECOCIDIO" como motor de la justicia en el desastre ocurrido en el Mar Menor.

Créditos de las imágenes: Julia Albadalejo, manifestación del 9 de junio, Murcia

Créditos de las imágenes: Julia Albadalejo, manifestación del 9 de junio, Murcia

La figura de ECOCIDE, como concepto que responde a la agresión masiva a un ecosistema y, en este caso, gracias a la negligencia extrema y a los vertidos deliberados, clandestinos y constantes, es la que mejor se adapta al grave daño que ha sufrido el Mar Menor durante las últimas décadas y serviría para dar una respuesta desde la Ley a la altura de las circunstancias. Una condena parcial basada en los delitos actualmente recogidos en el Código Penal puede no ser ejemplarizante y no servir para invertir la tendencia actual que asfixia a la laguna salada. Por ello, el Mar Menor debe convertirse en un símbolo más de la necesidad de instaurar esta nueva figura jurídica.

Asimismo, el crimen de ECOCIDE es la otra cara de la moneda de la potente iniciativa que ha surgido para otorgar derechos a la laguna salada a través de una Iniciativa Legislativa Popular. Ambas nuevas instituciones deben servir para que, desde una perspectiva ecocéntrica, sea posible devolver el equilibrio ecológico al Mar Menor.


Otras fuentes:

Entrada del blog de Stop Ecocidio España, 11/09/2020: Queremos un mar menor sin ecocidio

Prensa: ¿Puede España arreglar su peor crisis ecológica haciendo de una laguna una persona jurídica? The Guardian, 18/11/2020 

Plataforma Promotora de la Personalidad Jurídica del Mar Menor a través de una Iniciativa de Legislación Popular: ILP Mar Menor

Video (en español): 500.00 firmas para frenar el ecocidio en el Mar Menor y convocatoria de firmas de la ILP


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